viernes, diciembre 5, 2025
spot_img

La caída de los neoliberalismos reales

Debe leer

En medio del desplome y la caída de los socialismos reales, Chile fue considerado, a nivel mundial, un “laboratorio del neoliberalismo”, en lo económico, lo político, lo ético y lo cultural.***

Siguiendo a Fukuyama y a Friedmann, las voces embriagadas de iluminismo sostenían con prepotencia que Chile era la concreción del “fin de la historia”; de la “democracia planetaria”.

La globalización capitalista, la “aldea global”, entró a Chile con todo, como modelo de una transición desde una dictadura feroz hacia una democracia representativa, y descalificando, casi sin límites, los históricos proyectos de izquierda y revolucionarios.

Fin de ese iluminismo

Los pasos y traspasos, apresurados y rápidos, de fuerzas que históricamente levantaron ideas y propuestas anticapitalistas, hacia el campo del neoliberalismo en plena ebullición, se desarrollaron con oportunismo y sentido de la oportunidad. Incluso con negación histórica.

Y empujaron (hasta hoy mismo) la idea de que era posible, (pacto trancisional mediante entre sectores que lucharon contra la dictadura fascista y las fuerzas dictatoriales, encabezadas por el propio tirano), establecer una “gobernabilidad democrática” perdurable en el tiempo.

Muchos acontecimientos; no pocas acciones y definiciones, hasta hoy, están totalmente marcadas por esta referencia fundacional estratégica y totalitaria.

Hay textos; imágenes; acciones de estado; ejercicio mayúsculo de las corporaciones transnacionales en el territorio chileno; pactos y acuerdos públicos y privados, que muestran todo esto.

Qué duda cabe, que en este proceso la intervención norteamericana ha sido determinante. En todos los aspectos.

En una gran medida, Chile es hoy lo que es, producto y consecuencia de este proceso.

Hay diversos autores y filósofos de la política y de la historia, de muy diversas corrientes, que nos han legado un relevante juicio: Las civilizaciones (especialmente las élites que ejercen el poder), tienden a no reconocer las crisis; los efectos nefastos de lo que han impuesto y construido; y tal vez, como un absurdo mecanismo de defensa, se empeñan en no generar las transformaciones y sostener como sentido final….lo que han hecho. Y, eventualmente, abrirse a reformas que, en su paradigma, reafirman las estructuras y bases de lo realizado.

Es un dogma.

La metáfora trágica de Nerón, quemando y quemándose Roma, cuna del imperio en decadencia, advierte de esta conducta de las élites.

Hay no pocos casos históricos.

Hoy, mientras los pueblos gritan; salen a las calles en todo el mundo; en formas multitudinarias; las élites, especialmente del occidente neoliberal, no pueden detener el genocidio de un pueblo entero que sin duda marcará trágicamente a toda la Humanidad hacia el futuro.

Más todavía, varias de esas potencias impulsan y respaldan este genocidio.

Tampoco pueden frenar las profundas fragmentaciones; las desigualdades; las tensiones y guerras en curso. Su ceguera e iluminismo, que se amparó en “las nuevas tecnologías”, ha sido superado porque la nación-potencia que más desarrrolla esos ámbitos es….CHINA.

A pesar de ser,  en un tiempo histórico breve, pero intenso, hegemonías totales del planeta en un progresivo avance del capital especulativo-financiero.

Fin de la fantasía

Sin embargo, y a pesar de todo eso, el mundo camina hacia el multelareralismo realmente existente. Eventual superación de esta hegemonía neoliberal de la cual Chile fue considerado “un laboratorio” ejemplar.

Africa se mueve en esa dirección. Asia, y Asia Pacífico, igual. El resultado electoral en Corea del Sur abrirá más este proceso.

En Europa se siguen abriendo caminos.

En nuestro continente, Estados Unidos impone bloqueos, castigos, sanciones, para evitar este sacrificado curso de acción. Y se continúa con el gastado, noventero y cada más precario argumento de que se trata de “dictaduras”.

Los BRICS se reunen en Brasil, país que tiene la presidencia pro tempore, y se renueva el camino en nuestro continente hacia la integración, como forma de construir un bloque de naciones que respetan y reconocen sus asimetrías, y que buscan superar las fragmentaciones, las desigualdades, las tensiones bélicas, y las intervenciones de potencias.

La CELAC sigue siendo una base real y objetiva para ese camino.

En este contexto, todo indica que es necesario, y urgente, abrir paso a una nueva alternativa nacional en Chile. Una alternativa no excluyente.

Que tome con fuerza acciones para generar unidad nacional, sobre la base de la participación y la superación de los reales problemas socio-económicos que afectan severamente a las mayorías nacionales.

Sobre la base de una necesaria y nueva política económica, que se sustente en el crecimiento estable y permanente de la economía chilena, y no sometida a las tensiones que le generan las incontrarrestables incidencias de las corporaciones transnacionales financieras.

En esta unidad nacional NADIE puede ser excluido. Los privados deben ser parte de este camino.

Los movimientos sociales; las fuerzas políticas; las expresiones religiosas; las comunidades y Pueblos Originarios. Las instituciones del Estado; las Fuerzas Armadas.

Se trata de un desafío inmenso que urge hacerlo. No es una opción.

***Juan Andrés Lagos, es periodista, académico y encargado de comunicaciones del Partido Comunista de Chile

- Publicidad -
- Publicidad -spot_img

Lo más reciente

Gobierno golpea a Kast por supuesta crisis fronteriza: “Se ha construido un relato que no es efectivo”

El Gobierno salió a golpear al candidato republicano José Antonio Kast por la supuesta crisis migratoria en la frontera...

Los destacados del día