Un ranking elaborado por el sitio Military Watch (MW) ubica a Chile en el primer lugar en Sudamérica y cuarto a nivel mundial como potencia en submarino balísticos.

Se trata de otro sitio de defensa caracterizado por armar estadísticas delirantes de defensa mundial con datos incompletos y errados. Como comentábamos en octubre del año pasado a propósito del ranking de otro sitio web de similares características, -habitualmente citado por medios periodísticos con escaso o nulo conocimiento de defensa- «el indicador está plagado de inconsistencias, errores gruesos y absoluta ausencia de análisis fino y detallado que sea realmente valioso como material de divulgación capaz de dibujar un panorama realista de una comparativa de real poder de un país desde el punto de vista militar».

En el caso específico de este ranking (que es solo uno de varios desarrollados por MW) muestra en el primer lugar a Estados Unidos con 14 sumergibles balísticos, seguido por Rusia con 11 y luego, en tercer lugar, China con 6.

En el cuarto lugar aparece Reino Unido con 4, Francia con 4 y Chile con 4, compartiendo con estos países el puesto que el ranking elaboró.

Para el caso de nuestro país, el sitio hace referencia al SS-21 “Simpson” y el SS-20 “Thomson” Clase 209 del tipo 1400-L y los SS-23 “O’Higgins” y el SS-22 “Carrera” de la clase Scorpéne.

Falsedad de datos

Sin embargo, el sitio utiliza información derechamente falsa, olvidando en primer lugar lo que implica el verdadero concepto de submarino balístico: unidades navales estratégicas diseñadas para transportar y lanzar misiles balísticos intercontinentales con ojivas nucleares.

Algo que, definitivamente, ni Chile ni nadie en Latinoamérica esta siquiera cerca de poseer.

Además, y ya explorando la información detallada referida solo a la Armada de Chile, se cometen errores gruesos, como el reducir la flota de superficie a solo 4 fragatas (dos del tipo Karel Doorman Class, una del tipo 22 y una del tipo 23 Duke Class), apenas la mitad de las efectivamente en servicio (faltando dos clase Duke y dos clase Adelaide). eso sin considerar la ausencia de lo que catalogan como buques patrulla, donde deberían estar consideradas las OPV, entre otras unidades (el ranking dice, derechamente, «0»).

Asimismo, existen gruesas falencias en la composición de la Fuerza Aérea y el Ejército nacional, que solo dejan en evidencia que la información aportada por este medio, radicado en Corea del Sur, aporta poco y nada a un verdadero análisis y conocimiento de la defensa a nivel mundial. 

En definitiva, solo aporta a notas de prensa que buscan titulares grandilocuentes pero que en definitiva solo difunden información falsa o sesgada, engañando al lector general, y no aportando nada a la entrega de información realmente seria sobre el sector.