Un nuevo testimonio vuelve a colocar dudas en lo ocurrido el jueves pasado en el Estadio Monumental, ya que asegura que el “zorrillo” de Carabineros pasó por encima de las víctimas y no que haya caído una reja sobre sus cuerpos.
Se trata de un guardia de seguridad, quien relata que al momento de la tragedia estaba trabajando en calles Benito Rebolledo con Marathon.
“La calle era bastante estrecha, estábamos en un horario donde empezaba a llegar bastante gente”, relata el testigo y cuyas declaraciones recoge 24 Horas.
Agrega que “en eso se nos forma, a lo lejos, un montón de jóvenes -no era ninguno mayor de edad- que empezaron a reunir de a poco y empezamos a ver la avalancha”.
“Se está mal interpretando la información”
Indicó que “se está malinterpretando muchísimo la información. Se está dejando a los dos jóvenes fallecidos como que ellos eran parte de esta avalancha y a mi criterio no es así”.
Relata que el hecho ocurrió en hora peak donde había mucha gente haciendo filas para entrar al estadio y “con esta avalancha la gente, aunque no tenía entrada, comenzó a pasar”.
Relato de lo ocurrido
El testigo cuenta que muchas personas comenzaron a caer al suelo, debido a que el portón en el lugar era más estrechos. “Yo calculo que unas 10 personas” cayeron.
“El zorrillo no venía a muchos metros de distancia de ellos, se veía que venía acorralándolos, encima de ellos. El zorrillo vio cómo los jóvenes caen”, advierte.
“La reja en ningún momento se cayó, no se cayó sobre nadie porque esas vallas papales están muy bien amarradas con alambres”, deja en claro.
“El zorrillo continuó acorralándolos”
Posteriormente dijo que la información que se ha entregado de que los jóvenes quedaron aprisionados por las vallas es errónea.
“No fue así, los jóvenes cayeron en la calle, no había nada sobre ellos”, señaló, agregando que “encuentro inexplicable la fuerza que se utilizó”, apuntando al actuar de Carabineros.
“Los niños cayeron, yo me encontraba al lado y los vi caer”, explicó.
“Cuando cayeron yo me corrí un poco más atrás y en ese momento, fue en menos de un segundo, pasa el zorrillo atrás de ellos y yo le hice así (un gesto) para que frenara y el zorrillo no frenó y pasó por encima de estos dos jóvenes”.
Añadió que vio cómo el carro policial pasó a llevar a otras personas, pero estas lograron levantarse y seguir su camino.
“El zorrillo mismo botó la reja (…) a los niños jamás les cayó la reja encima, les cayó un zorrillo encima”, aseguró.
“El zorrillo arrasa con toda esta gente, se balancea como si estuviera pasando encima de sacos, y aun así no tiene la decencia de frenar, sino que siguió acorralando gente”, precisó.







