Prácticamente aislada por aire ha quedado este lunes Alemania, debido a una huelga de un día que afecta desde esta madrugada a 13 de los principales aeropuertos del país.
Esto ha provocado la cancelación de 3.400 vuelos. Aproximadamente medio millón de pasajeros se han visto afectados.
El paro es convocado por el sindicato ver.di. y abarca 11 de los principales aeropuertos.
El reclamo es por mejoras salariales para los empleados del sector público y en los servicios de asistencia en tierra.
Los aeropuertos afectados son los de Múnich, Stuttgart, Fráncfort, Colonia/Bonn, Düsseldorf, Dortmund, Hannover, Bremen, Hamburgo, Berlín-Brandeburgo y Leipzig-Halle.
En el caso de los aeropuertos de Weeze, cerca de Düsseldorf, y en el de Karlsruhe/Baden-Baden, sólo han sido convocados a secundar la huelga los empleados de seguridad aérea.
En tanto, el aeropuerto de Hamburgo lleva paralizado desde el domingo, después de que ver.di adelantara sin previo aviso el paro para los servicios de asistencia en tierra.
«Consecuencias de gran alcance»
Para los empleados del sector público, el sindicato busca un aumento salarial del 8%, pero de al menos 350 euros al mes, así como negociar tres días libres adicionales.
Además, se reclama por primas por trabajar en horarios poco favorables y que supongan una carga adicional.
Ver.di también exige un aumento de 200 euros mensuales para los salarios de las personas en formación y en prácticas.
Para la seguridad aérea se pide mejoras en la protección de salud y seguridad en el trabajo.
Además, 30 días de vacaciones y días libres adicionales por los turnos, entre otras exigencias.
El director general de la Asociación de Aeropuertos Alemanes (ADV), Ralph Beisel, señaló que “hacer huelga en 11 lugares al mismo tiempo tiene nueva dimensión”.
Aludió a las “consecuencias de gran alcance para la movilidad individual y los procesos económicos”.
MS (dpa/efe/afp)