“Provechosa” fue la reunión que sostuvieron este martes el ministro de Hacienda, Mario Marcel, con el fiscal nacional, Ángel Valencia, en La Moneda, con el objetivo de limar asperezas tras la rebaja en el presupuesto 2025 para la Fiscalía y ahora, la autoridad, está enfocada en superar el recorte por el “efecto rebote” a las policías.
“Fue una reunión muy provechosa (…) planteamos con mucha franqueza, creo que de manera bastante clara, cuáles son nuestras necesidades y el contexto actual, pero creo que hemos iniciado un camino muy concreto que va a permitir que la continuidad operativa de la Fiscalía no se vea afectada desde el punto de vista del presupuesto”, dijo el jefe de los persecutores al salir del encuentro.
En ese sentido, Valencia expresó que “nos vamos muy conformes, muy optimistas, tenemos la certeza de que hemos sido escuchados, de que hay claridad respecto a nuestras necesidades y de que, en definitiva, vamos a contar con los recursos necesarios para funcionar”.
“Vamos a entrar en una fase técnica breve, muy breve, en que los equipos técnicos de la Fiscalía van a dialogar con los equipos de Hacienda por los efectos de revisar qué es lo que necesitamos, qué es aquello de lo que no podemos prescindir”, aseguró.
Por su parte, el jefe de la billetera fiscal indicó que el ajuste del presupuesto fue mandatado por la Ley de Presupuestos y “se aplicó de manera pareja por subtítulos de gasto, que para que lo entienda la gente, estos son categorías de gasto, gasto en personal, bienes y servicios de consumo, transferencias de capital, y eso se aplicó a todas las instituciones con las exclusiones que se definieron en los acuerdos en el Congreso”.
“Cuando se comunicó esto a las instituciones, se les señaló que había posibilidad de que estas propusieran una distribución distinta de esos ajustes (…) hay tiempo para que eso ocurra, y al mismo tiempo, durante el año, como el presupuesto se ejecuta con una serie de normas de flexibilidad presupuestaria, es posible, por lo tanto, ir adecuando el presupuesto a las necesidades de las instituciones, siempre dentro de los marcos que permiten los recursos del presupuesto del país”, planteó.
Ahora, el foco de la autoridad se centrará en el recorte presupuestario para la PDI y Carabineros que fue denominado “efecto rebote” como lo señaló la ministra del Interior, Carolina Tohá, para explicar la rebaja de dinero para la adquisición de artículos no financieros, es decir, recursos para vehículos.
“El efecto rebote tiene que ver con que en el presupuesto hay lo que se llama transferencias consolidables ¿Qué significa eso? Significa que son recursos que salen de una institución pero que se van a otro servicio público para la ejecución de un determinado programa. Por ejemplo, nuestros mismos temas de seguridad ciudadana, hay programas del ministerio del Interior que se ejecutan a través de las policías para lo cual el ministerio le transfiere unos recursos. Entonces, al ajustar los recursos como parte de este ajuste parejo en los ministerios de origen, eventualmente podía ocurrir que se ajustara algo en el ministerio o la institución que recibía los recursos”, planteó Marcel.
Sin embargo, aseguró que “los ministerios de origen se les dio la facultad para, dentro del marco ajustado de presupuesto, generar una composición distinta, entonces en esas circunstancias, el propio ministerio del Interior va a tener la posibilidad de decir, ‘mire, el lugar de acá donde se está afectando unos recursos para carabineros, vamos a hacerlo en esta otra parte de nuestro presupuesto institucional’”.
Marcel finalizó indicando que a todos los ministerios de servicio en la aplicación del ajuste, se les dio como tiempo hasta marzo próximo para poder hacer las adecuaciones, por lo que “está el espacio para producir esa readecuación de tal manera que no repercute sobre el tema de las policías”.
