La ministra secretaria general de Gobierno (s), Aisén Etcheverry, señaló la tarde de este martes que «la firma de compraventa (de la casa del expresidente Salvador Allende) no debió haber ocurrido».
En ese sentido, recalcó que «hubo una conducción del proceso que no fue la adecuada, y se hizo valer la responsabilidad política a través de la renuncia de la exministra Sandoval. Esto no es baladí, sino que da cuenta de la importancia de esta materia para el Presidente y el Gobierno».
La vocera (s) hizo hincapié luego en que el proceso de adquisición de la propiedad «se encontraba a medio camino. Faltaban aspectos y el viernes se tomó la decisión de no continuar«.
Explicó además que, junto a la familia Allende, se tomó la decisión de resciliar el contrato de compraventa, que es un acuerdo formal entre las partes para poner fin a un contrato previamente celebrado.
Finalmente, señaló que el proceso «no ha tenido y no tendrá consecuencias, porque no han existido transferencias de recursos».