Por: Leonardo Jerves, subgerente de ciberseguridad de Flow.
El verano es sinónimo de descanso, viajes, paseos y relax, sin embargo, también puede convertirse en un dolor de cabeza para quienes caen en las redes de estafadores online. Durante la temporada de vacaciones, se producen diversos fraudes que evidencian la necesidad de educarnos y protegernos mejor.
Si bien las estafas no son un fenómeno nuevo, el contexto digital las ha multiplicado y sofisticado. Durante el verano, los fraudes más comunes incluyen ofertas falsas de arriendo de cabañas. En este caso, redes sociales y sitios web poco confiables se llenan de anuncios engañosos que utilizan fotografías atractivas y precios tentadores para estafar a las personas, que pagan por adelantado solo para descubrir, al llegar al destino, que la propiedad no existe o no está disponible.
Otra estafa habitual se relaciona con descuentos irreales en pasajes, donde sitios fraudulentos prometen boletos de avión o bus a precios increíblemente bajos, que el cliente paga para luego no recibir nada o, peor aún, entregar sus datos bancarios a estafadores. A ello se suman reservas en hoteles inexistentes o sin respaldo, donde el usuario paga por nada.
Seguridad online: Un hábito indispensable
En este contexto es clave comprender que la seguridad online no es solo una cuestión técnica, sino también cultural. Necesitamos aprender a cuestionar lo que vemos en internet y adoptar hábitos digitales responsables.
Entre otros aspectos, es importante optar por hacer reservas y compras en plataformas conocidas, evitando enlaces sospechosos que lleguen por correo o redes sociales.
También es recomendable investigar antes de pagar. Ante una oferta, es conveniente, por ejemplo, conocer las opiniones de otros usuarios sobre el servicio ofertado. Además, es clave priorizar sistemas de pago seguros. Las transferencias bancarias directas pueden ser riesgosas, mientras que las tarjetas de crédito ofrecen mayor protección frente a fraudes. Tampoco se deben compartir datos financieros por correo o mensaje.
Otras sugerencias útiles son verificar la seguridad del sitio web, mantener sus dispositivos protegidos y desconfiar de urgencias inesperadas. Los correos o mensajes que solicitan acciones inmediatas suelen ser fraudulentos. Antes de hacer clic, confirme con la empresa si el mensaje es válido.
El entorno digital nos ofrece comodidad y acceso a una amplia gama de servicios, pero también exige que seamos usuarios más conscientes. Así como aseguramos nuestras casas antes de salir de vacaciones, debemos tomar medidas para blindar nuestra información al navegar en internet. La prevención es clave para disfrutar unas vacaciones tranquilas y seguras.
