- El guía de montaña y atleta recorrió bahías e islas, entre icebergs, ballenas y pingüinos, conjugando deporte y educación ambiental.
Para Chris Madrid, experto guía de montaña, liderar –por primera vez- las caminatas en una expedición a la Antártica, durante 21 días, es un sueño hecho realidad el cual consiguió en base a esfuerzo, constancia y amor por su trabajo.
“He regresado a casa hace un par de días y mientras leo mi bitácora de viaje las palabras que más se repiten en mis escritos son gratitud, inmensidad, montañas, ballenas, hielo y felicidad. Ser guía de montaña en este territorio era un sueño que veía muy lejano, pero el trabajo, la pasión, la constancia y las energías puestas en los últimos años en mi carrera profesional y deportiva me permitieron hacerlo realidad, y al ser una oportunidad tan única, intenté honrar cada valioso momento”, añade el deportista.
La meta del grupo era encontrar el punto más alto para disfrutar de la inmensidad del “Séptimo Continente”, bajo la constante de educación ambiental, cuidado de la naturaleza y práctica deportiva. Entre icebergs, islas, pingüinos y ballenas, el grupo cumplió su cometido, llenando de regocijo a todos los participantes.
“Este viaje como guía de montaña fue la oportunidad perfecta para llevar a cabo este deseo de educar a través de las montañas y el deporte. Gracias a esta experiencia pude vivir, sentir y ver con mis propios ojos por qué este territorio es tan importante para nuestro planeta; lo que sumado a la inmensidad y belleza, hicieron que me enamorara al instante de este paraíso, lo que hizo que tomara con más fuerza mi misión de explorar y educar”, señala Madrid.
La seguridad del equipo estuvo a cargo de Garmin.“Cada día, especialmente para poder regresar al barco, ya que muchas veces entre las montañas, la nieve que caía, y los iceberg que cubrían todo el territorio, perdías la vista del barco principal. Cada mañana, antes de salir a explorar, lo primero que hacía era guardar la ubicación del barco principal, luego una vez en la bahía guardaba la ubicación del zodiac y finalmente activaba el seguimiento”, indica.
Tras regresar de esta primera expedición, Madrid ya se prepara para una segunda aventura en el “Continente blanco”. Esta vez será durante 32 días y está seguro que nuevamente volverá a dejarse sorprender por la inmensidad de la parte más austral del planeta.