Los espacios comunes de edificios y condominios, como quinchos y salones, registran una alta demanda, alcanzando un 60% de ocupación a nivel nacional, según cifras de la plataforma Kastor, especializada en la administración de comunidades.
Reuniones familiares, cenas, asados y los tradicionales encuentros de «amigo secreto» son las actividades más populares que se realizan en estas áreas, convirtiéndolas en el centro de las festividades de fin de año para muchos residentes.
Rafael Escobar, fundador de Kastor, explica que «la preferencia por estos espacios se debe a su comodidad, tamaños, cercanía y, en muchos casos, al equipamiento que ofrecen, como parrillas, mesas, y áreas cerradas para mayor confort».
Los precios de arriendo de estos espacios oscilan entre $10.000 y $50.000, dependiendo de las instalaciones disponibles, lo que los convierte en una opción accesible para grupos que buscan celebrar sin salir de su entorno residencial en un espacio de mayor tamaño que el de los departamentos.
Desde Kastor aseguran que las reservas aumentan considerablemente durante noviembre y diciembre, por lo que instan a los vecinos a planificar con anticipación para asegurar su lugar. «Los espacios más completos y con mejores vistas son los primeros en agotarse», señala Escobar.
La tendencia refleja un cambio en los hábitos de celebración, donde cada vez más personas necesitan encontrar espacios de mayor tamaño que sus hogares y cercanos.