Ayer domingo ejercicio se inició la octava versión del ejercicio aeromilitar multinacional Cruzex 2024, que se desarrollará hasta el 15 de noviembre en Rio Grande do Norte, Brasil, el cual reúne a más de 3 mil militares y cerca de 100 aeronaves de 16 países de América, Europa y África, y que tendrá como principales participantes, por los medios aportados, a los anfitriones, Estados Unidos y Chile.
El ejercicio internacional tiene como objetivo fortalecer la interoperabilidad entre las Fuerzas Armadas brasileñas y los demás países participantes, mejorando las tácticas conjuntas y las capacidades operativas en entornos de guerra simulada.
Reconocido como el ejercicio militar más importante de América Latina, en la actual versión intervienen, en las operaciones aéreas, escuadrones de vuelo de Brasil, Argentina, Chile, Colombia, Estados Unidos, Paraguay, Perú y Portugal. Además, Chile, Colombia, Estados Unidos, Paraguay y Perú contribuirán en las operaciones espaciales y cibernéticas. Por su parte, Sudáfrica, Alemania, Canadá, Ecuador, Francia, Italia, Suecia y Uruguay enviarán observadores militares, enriqueciendo el intercambio de experiencias y fortaleciendo la cooperación internacional.
En el caso de Chile, la FACh desplegó cinco cazas F-16 Block 50 pertenecientes al Grupo de Aviación N°3 de la Iª Brigada Aérea con asiento en la Base Aérea Los Cóndores de la ciudad de Iquique y, en apoyo al desplazamiento en misiones de transporte y reabastecimiento en vuelo, sumó un avión KC-135E Stratotanker y un Boeing 737-300 pertenecientes al Grupo de Aviación N°10 de la II Brigada Aérea.
Los dueños de casa, en tanto desplegarán por primera vez en ejercicios su nuevo caza de combate F-39 Gripen, además de los KC-390 Millennium y aviones de control E-99. Estas aeronaves cumplirán misiones como alerta, escolta, ataque, reconocimiento y apoyo logístico. Además, unidades especializadas como el Centro de Defensa Cibernética (CDCAER) y el Comando de Operaciones Aeroespaciales (COMAE) contribuirán con capacidades avanzadas de defensa antiaérea y cibernética.
En cuanto a la participación de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, envió por primera vez a Brasil un destacamento de cuatro cazas F-15C Eagle pertenecientes a la Guardia Aérea Nacional. En concreto, se trata de aviones de la 159ª Ala de Caza de la Guardia Nacional Aérea de Luisiana, con base en la Estación Aérea Naval Conjunta de Nueva Orleans.