Por: Jorge Castillo Fuentes, Contraalmirante, Comandante en Jefe de la Tercera Zona Naval
El 6 de noviembre de 1940, bajo el mandato del Presidente Pedro Aguirre Cerda, se dicta el Decreto Supremo 1747, el cual determina los límites del Territorio Chileno Antártico, fecha trascendental en la soberanía efectiva, desde esa fecha haciendo patente que Chile al sur limita con el Polo.
Este hecho capital de nuestra historia tiene una serie de antecedentes, siendo producto de una serie de acciones que Chile había consagrado desde el siglo XIX, así como también operaciones como la liderada por el Piloto Segundo Luis Pardo Villalón, realizando el rescate de la Expedición Imperial Transantártica en 1916.
La Armada de Chile, a través de unidades navales y bases, ha tenido un despliegue continuo e ininterrumpido desde 1947, permitiendo a través del mar la proyección de la soberanía efectiva nacional con la construcción de bases, refugios, estudios hidrográficos, señalización marítima, protección del medio ambiente marino, estudios científicos, salvaguarda de la vida humana en el mar, además de un sinfín de tareas que se han ganado espacios importantes en nuestra historia nacional.
A esto debemos sumar las reflexiones de distintos intelectuales entre los que podemos mencionar a Manuel Señoret, Oscar Viel, Julio Escudero, así como Ramón Cañas Montalva, Eugenio Vicuña Orrego y Oscar Pinochet de La Barra, entre otros, quienes fueron parte de ese grupo selecto de chilenos que, adelantados a su tiempo, fueron capaces de visualizar la importancia del Territorio Chileno Antártico, influyendo en forma clave en los tomadores de decisiones.
Es de esta manera que, aquella importante decisión materializada el 6 de noviembre de 1940, es producto de un ambiente de ideas y de hacedores, que influyeron y fueron capaces de sintetizar postulados claves, lo cual conllevó años después el despliegue de la Primera Expedición Antártica Chilena con la Fragata Iquique y el Transporte Angamos.
En el Día de la Antártica Chilena, debemos recordar a quienes forjaron con ideas y planteamientos tan importante decisión, al igual a quienes dieron carácter, fuerza y empuje a que Chile sea un país Antártico con proyección al futuro.
Pues esta historia se comenzó a escribir a través del mar, con personas destacadas y trascendentes en nuestra historia como el Comodoro Federico Gueselaga, quien tuvo al mando la Primera Expedición Antártica Chilena, el Teniente Primero Boris Kopaitic primero comandante de la actual Base Naval Antártica “Arturo Prat”, así como el Marinero Primero Romilio Canales, primer chileno en pisar al sur del Círculo Polar y tantos otros que a bordo de nobles unidades como la “Iquique”, “Angamos”, “Covadonga”, “Lientur”, “Yelcho”, “Piloto Pardo”, “Oscar Viel”, “Izasa”, “Lautaro”, “Galvarino”, “Sargento Aldea”, “Janequeo” y tantas otras que han sido forjadoras con los servidores de la Armada de Chile del legado que hoy el “Fuentealba”, “Aquiles”, y el actual “Lientur” así como el recién entrado en servicios rompehielos “Almirante Oscar Viel”, son nuevas herramientas pero con la misma voluntad, entrega y profesionalismo de las dotaciones, marcaran con su blanca estela en los mares australes del Territorio Chileno Antártico.
