Tras la escandalosa salida de Manuel Monsalve desde el Gobierno en medio de una denuncia por violación, se están acumulando las renuncias en la Subsecretaría del Interior, coincidiendo con la llegada del nuevo titular Luis Cordero.
La última en dejar su cargo fue la asesora legislativa Ana Lya Uriarte, quien presentó su renuncia anoche. Su salida es especialmente dura para la gestión de la cartera considerando su vasta trayectoria, su estrecha asesoría al comité político del Gobierno y su amplia red de contactos transversales.
Asimismo, se sumó Gustavo Herrera, encargado de seguimiento de compromisos de la Subsecretaría, y que además era jefe directo de la denunciante en el caso Monsalve. Ellos se suman a Gabriel de la Fuente, exjefe de gabinete de Monsalve y exministro de la Segpres en el gobierno de Bachelet II, y los dos asesores de prensa más cercanos al exsubsecretario, Ana María Araneda y Diego Bustamante, quienes dejaron sus cargos el mismo día de la renuncia de Monsalve.
Las salidas de Uriarte y De la Fuente, por otra parte, implican un duro golpe a la influencia del bacheletismo al interior del Gobierno.
