La Cena de Camaradería de Las Fuerzas Armadas Argentinas desarrollada la noche del pasado jueves en la capital trasandina, más allá de la polémica por la inasistencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel tras no recibir invitación, dejó varios aspectos interesantes en relación a la defensa del vecino país.
Y es que en su discurso, el Presidente Javier Milei resaltó la reintegración de las Fuerzas Armadas en la vida nacional, el aumento real de recursos para sus presupuestos, la adquisición de importantes medios para su renovación, su reforzamiento para servir expeditamente en el apoyo al orden interno y la necesidad de repotenciarlas para ponerlas al servicio de una «Argentina potencia».
En ese contexto, el Mandatario resaltó que «los gobiernos anteriores que se jactaban de ser los máximos defensores de la soberanía nacional, al mismo tiempo ocultaban o menospreciaban, ya sea por revanchismo o ignorancia, el rol de aquellos que literalmente dan su vida por la Patria», ante lo cual recalcó ante los máximos jefes militares del país que «vamos a hacer el mayor esfuerzo posible para reconciliar a la política con las Fuerzas Armadas y honrar el sacrificio que ustedes hacen por la Patria».
Y aunque reconoció que la situación económica que recibió al asumir su cargo estaba lejos de ser óptima, refirmó su compromiso en mejorar las condiciones del personal militar, y dar curso a los ascensos largamente postergados, recalcando que «vamos a seguir empujando para que a cada integrante de las fuerzas se le reconozca el esfuerzo y el mérito en tiempo y en forma. Pero también entendemos que las fuerzas requieren de equipamiento y tecnología a la altura de la titánica tarea que los argentinos les encomendamos«.
Fue así como recordó que «compramos los 24 aviones de combate F-16 para la Fuerza Aérea, que es ni más ni menos la compra de equipamiento militar más importante de los últimos 40 años. Por eso también modernizamos cinco tanques TAM, que si vieron las noticias tuve el placer de estrenar uno en primera mano. Y decimos que las Fuerzas Armadas trabajarán en conjunto con los mejores de todo el mundo. De eso se trata, entre otras cosas, e iniciativa de sumarnos como socios globales de la OTAN«.
Todo lo anterior para hacer frente el compromiso «de revertir el vaciamiento que hace décadas sufre las de las fuerzas, que ha dejado a la sociedad toda desprovista de protección y ha relegado a una de las instituciones más trascendentes de nuestra patria a un lugar profundamente inmerecido. Hoy que la Patria los necesita más que nunca, en un mundo que se vuelve cada día más conflictivos, tenemos la vocación de fortalecer a las Fuerzas Armadas en sus funciones«.
Seguridad interior
El Jefe de Estado abordó, además, la ampliación del rol de las FF.AA. trasandinas en la seguridad nacional, destacando que si bien «hasta ahora han sido encomendadas con la tarea de proteger pura y exclusivamente de potenciales amenazas externas (…) donde ciertos estados tejen vínculos con organizaciones narco, terroristas y del crimen organizado local, donde las organizaciones criminales a veces cuentan con más recursos, tecnología y armamento que la fuerza de Seguridad, es imperativo que repensemos estos viejos paradigmas».
Por ello, hizo hincapié en que «es tiempo de modernizarnos y adaptarnos a estas nuevas amenazas. Por eso estamos modificando la Ley de Seguridad Interior para que las Fuerzas Armadas puedan dar apoyo a la fuerza de Seguridad en situaciones excepcionales, sin que se requiera acudir a la opción extrema, que es la declaración del estado de sitio».
Argentina potencia y FF.AA.
Finamente, Milei sostuvo que «tenemos una visión para la Argentina: queremos una Argentina grande, una Argentina fuerte, una Argentina potencia. Y no hay una sola potencia en el mundo que no cuente con fuerzas armadas profesionales, de calidad, con tecnología, recursos y fundamentalmente que no tengan el apoyo de la sociedad».
Concluyó señalando que «hay un principio implícito bastante arraigado entre las tropas de los distintos países del mundo que dice que nunca que hay que abandonar a un compañero en combate. Nuestro sueño es que como país aprendamos a nunca abandonar a nuestras fuerzas, que son quienes nos cuidan«.