El Jefe de la División Antártica de la Armada de Chile, comandante Lars Christiansen, destacó en una entrevista con el programa Las Cartas Sobre la Mesa de Infogate, la construcción del rompehielos “Almirante Viel” en el astillero de Asmar, el que entrará en servicio este miércoles 3 de julio, afirmando que con esto “estamos a la altura de los países grandes” y que lo que viene ahora es ponerlo en marcha en la Antártica chilena e invitar a los científicos a investigar en el buque.
El capitán de navío explica que la construcción del buque “es un paso gigantesco para Chile en la parte tecnológica e industria marítima. De partida es un gran paso y todo el mundo lo valora mucho, porque además de ser un rompehielos la gran gracia que tiene es que es un buque científico”.
“Por primera vez vamos a tener un rompehielos científico que va a estar a 500 millas de la Antártica (…) el 3 de julio el astillero lo entrega a la Armada y ahí parte todo el proceso de entrenamiento y conocimiento a fondo de todo lo que es operación del buque de la dotación designada y estaría bajando ya el próximo verano”, sostuvo Christiansen.
Sin embargo, el comandante expuso que la meta ahora es “usarlo, tenemos un laboratorio abordo, pero hay que usarlo, entonces en agosto nosotros tenemos la reunión científica más grande del mundo que se va a realizar en Pucón y ahí vamos a estar exponiendo el rompehielos e invitándolos a que vengan a hacer ciencia con nosotros en vez de que bajen buques desde Europa o de otra parte del mundo”.
“Al construir un rompehielos estamos a la altura de los países grandes y eso se reconoce, se aprecia y se agradece, porque no todos los países son capaces de construir algo como lo que construimos nosotros (…) este es el buque más grande que se ha construido en Chile y es el punta pie inicial para un proyecto mayor”, afirmó.
Bases a la altura del siglo XXI
Christiansen también abordó lo que está haciendo Chile con sus bases en el continente helado para renovarlas y ponerlas en condiciones de lo que se requiere en el siglo XXI, apuntando que “las tres bases principales que son Profesor Julio Escudero, Teniente Luis Carvajal y Yelcho están en este minuto para su renovación completa. Carvajal es una base completamente nueva, Yelcho prácticamente es todo nuevo y Escudero que es la más grande que está en Base Frei, se le hace un update gigantesco”.
“Las bases del Instituto Antártico tienen su programa y están buscando el financiamiento para hacerlas totalmente nuevas y bajo tecnología moderna con cero contaminación, amigables con el medio. La base O’Higgins del Ejército, en tanto, fue renovada el año 2000 y está en bastante buenas condiciones; la Base Prat es un trabajo año a año para normalizarla a lo que actualmente se pide”, explicando que en esta última instalación se han hecho remodelaciones y se ha modernizado la tecnología como es el caso “del plan piloto de generación verde con paneles solares y generadores eólicos en base y lo importante es que es todo con fondos nacionales, el desarrollo tecnológico es nacional, los fondos fueron provistos por Corfo, entonces se está logrando un joint venture no solo con nosotros, sino que con gente de afuera que está trabajando para lograr cosas beneficiosas en Antártica”.
La importancia del INACH
El comandante también destacó la labor de investigación que realiza el Instituto Antártico (INACH) en la zona, resaltando la renovación que realizarán de sus tres bases instaladas en el continente helado.
“El caso de la Base Carvajal, que es la que está más al sur nuestro, la quieren hacer anual, es decir, que esté funcionando todo el año con personal científico”, señaló.
