El embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo, trató de bajarle el tomo a la crisis con Argentina entorno a la colocación de paneles solares de una base militar trasandina en territorio chileno, al comentar tras su comparecencia en la comisión de Relaciones Exteriores del Senado que nunca «hubo un impasse» con nuestros vecinos y que solo se trató de un «malentendido» ya «superado.
Así, comentó sobre la situación que las mencionadas estructuras «se están retirando y esperamos que termine lo más pronto posible».
Además, descartó conflictos en las relaciones entre ambos países, señalando que «Chile ha presentado un reclamo, el gobierno argentino lo ha aceptado y las cosas volverán a su total normalidad».
Restando complejidad a la crisis, Viera-Gallo sostuvo que «nunca hubo un impasse, lo que hubo fue un malentendido y supongo que eso quedó ya superado«.
Por otra parte, al preguntársele sobre cómo fue posible que habiendo un puesto de observación nadie haya advertido que los paneles se estaban instalando en Chile, el embajador explicó que «el límite no tiene una expresión material, sino que hay un cerco. Entonces, el límite georreferencial lo saben la gente de la Dirección de Frontera y Límite y lo sabrán de ambas cancillerías, más la Armada seguramente, o los altos mandos de las Fuerzas Armadas, pero no lo sabe cada uno porque ellos viven ahí, donde hay un cerco entonces daban por bueno que ese cerco era el límite».