La Armada de Colombia, en conjunto con la Fuerza Aérea de dicho país, localizó dos semisumergibles en el momento en que navegaban en aguas del Departamento de Nariño, en el Océano Pacífico. En la interdicción fueron incautados 4.919 kilogramos de clorhidrato de cocaína que eran transportados por organizaciones narcotraficantes.
El primer semisumergible localizado era tripulado por tres ciudadanos colombianos. Durante la inspección, el personal militar encontró que los sujetos habían abierto las válvulas para hundirlo, así que rápidamente trasladaron los hombres a bordo de una Unidad de Reacción Rápida – URR de Guardacostas e iniciaron maniobras para extraer el agua y evitar el hundimiento del artefacto. Al ver que el ejercicio era infructuoso, procedieron a sacar el alcaloide y dejar hundir el artefacto ilegal.
Las tres personas con los bultos hallados al interior del semisumergible de diferentes formas y tamaños que por sus características se asemejaría a sustancias ilícitas, fueron trasladados hacia el muelle de la Estación de Guardacostas de Tumaco – Nariño, donde las autoridades competentes realizaron a los paquetes la Prueba de Identificación Preliminar Homologada – PIPH, la cual arrojó positivo para clorhidrato de cocaína con un peso de 2.700 kilogramos.
Posteriormente, fue detectado el segundo semisumergible el cual, después de ser interceptado por las unidades de la Armada de Colombia y verificar que era tripulado por dos sujetos de nacionalidad colombiana y un tercero ecuatoriano, se encontró que igualmente habían abierto las válvulas para que se hundiera con el alcaloide, por lo que el personal militar actuó rápidamente y salvaguardó la vida de los sujetos, pasó los bultos a la unidad de superficie presente en el área y dejó zozobrar el artefacto ilegal, trasladándolos hasta el muelle de la Estación de Guardacostas de Tumaco, donde las autoridades determinaron que transportaban clorhidrato de cocaína con un peso de 2.219 kilogramos.
Los seis detenidos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes, quienes serán judicializados por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes. Se espera igualmente les sea imputado el delito de uso, construcción, comercialización y/o tenencia de semisumergibles o sumergibles.
Con este golpe a las organizaciones narcotraficantes, la Armada de Colombia evitó que se distribuyeran más de 12 millones de dosis en las calles del mundo, evitando el aumento de nuevos consumidores y la afectación a la salud pública.
«Las fuerzas militares de Colombia, a través de su Armada de Colombia y todos los componentes que la integran, continuarán trabajando de manera conjunta con la Fuerza Aérea Colombiana, el Ejército Nacional y, de manera coordinada, con la Policía Nacional, para impedir estos ilícitos de los grupos armados», recalcó el contraalmirante Rafael Aranguren, Comandante de la Fuerza Naval del Pacífico de la marina colombiana.
