Tras la compra por parte de Argentina de aviones de combate F-16 a Dinamarca, surgieron preocupaciones en el Parlamento expresadas a la Secretaría de Defensa sobre la preparación del Reino Unido en materia de defensa en el Atlántico Sur, más precisamente en las Islas Falkland.
El diputado conservador Robert Buckland, planteó la pregunta a Leo Docherty, recientemente asumido como Ministro de las Fuerzas Armadas, quien aseguró que la preparación de la defensa se evalúa continuamente para hacer frente a diversos acontecimientos.
Docherty reafirmó el compromiso del Reino Unido de garantizar la seguridad de las Islas Falkland asegurando que “mantenemos nuestra postura de defensa en el Atlántico Sur bajo revisión periódica para tener en cuenta toda la gama de acontecimientos. Estoy satisfecho de que la actual presencia militar en el Atlántico Sur sea del nivel adecuado para garantizar la defensa de las Islas”.
Las Islas Falkland albergan actualmente una fuerte presencia militar británica, incluida la base de la RAF en Mount Pleasant, que proporciona un puente aéreo vital entre las islas y el Reino Unido. Las fuerzas británicas estacionadas en el archipiélago incluyen una compañía de infantería, una batería de defensa aérea, cuatro aviones de combate Typhoon y, por lo general, una patrullera de la Royal Navy.
Argentina firmó la adquisición de 24 aviones F-16A/B ex daneses, además de misiles Sidewinder y AMRAAM. El Ministro de Defensa argentino, Luis Petri, encabezó recientemente la firma en Copenhague del histórico acuerdo de compra de los aviones de combate, con los que Argentina recuperará su capacidad de interceptación supersónica después de muchas décadas.
“Con estos nuevos aviones damos un paso trascendental en nuestra política de defensa, recuperando la capacidad supersónica de nuestra aviación y consiguiendo la entrada definitiva de nuestro Ejército del Aire en los retos tecnológicos del siglo XXI”, afirmó Petri.
Finalizando su discurso, el ministro aseguró que “gracias a esta inversión en defensa puedo decir con orgullo que empezamos a recuperar nuestra soberanía aérea y que toda nuestra sociedad está mejor protegida frente a todas aquellas amenazas que nos ponen a prueba”.
El Ministerio de Defensa argentino indicó posteriormente que “estos aviones de combate F-16 serán la columna vertebral del sistema de defensa aérea en Argentina, misión que realizaron los aviones Mirage durante más de 40 años hasta su desprogramación. La compra de estos aviones ratifica la decisión del Gobierno de promover la inversión en Defensa con el objetivo de fortalecer las capacidades del instrumento militar».
(Con información de MercoPress)
