La alcaldesa de Providencia Evelyn Matthei (UDI), ha tomado un rol protagónico en el proceso municipal ya que ella decide quien va o no de candidato(a) a estas municipales, un rol que no ha tenido contrapeso y que pareciera contar con el apoyo de los partidos que se han alineado detrás. De ser así sería algo verdaderamente extraordinario para la centroderecha, pero podría tratarse de una ‘trampa mortal’.

Ella ha definido la situación en Santiago donde irá el ex ministro RN Mario Desbordes lo que provocó la bajada del ex candidato presidencial, Sebastián Sichel: lo mismo ocurrió en Puente Alto donde reafirmo a la ex ministra Karla Rubilar y en la carrera por la Gobernación Metropolitana a la ex ministra Isabel Plá.

Ahora bien, en Santiago, Sichel tenía bastante buena proyección en sectores mas de centro e incluso de centro izquierda y que no son traspasables a un candidato como Desbordes. 

En Puente Alto la situación es un poco más compleja porque si bien Rubilar ha hecho un muy buen trabajo territorial el riesgo es que es una ‘territorio de los Ossandón’ y si se materializa la candidatura independiente del sobrino del senador  Ossandón y actual concejal Felipe Ossandón podría poner en aprietos a Rubilar. Lo mismo ocurre en Providencia donde Evelyn ha ‘ungido’ a Jaime Bellolio.

Si bien es cierto Matthei está muy bien posicionada en las encuestas y hoy brilla como una ‘lideresa’ este liderazgo y popularidad no es del todo traspasable a sus elegidos mas en una elección que es obligatoria y no hay antecedentes  concretos sobre el comportamiento del electorado.,

Una trampa mortal 

Si bien, esta vez, Matthei pareciera tener mando y control para organizar una municipal que le debería ser funcional y leal para la presidencial, la duda que surge es si esta ‘libertad’ es real o más bien una sutil y malévola trampa del conservadurismo machista de la UDI y de los controladores de la derecha que pondrán a prueba el ‘olfato político’ de Evelyn ya que si pierde sus candidatos es una derrota para ella y por ende su potencial para llegar a La Moneda se diluyen y darían paso al o a la verdadera candidato del sector.

Porque la verdad es que en los pasillos de los partidos de la derecha y entre los controladores no hay convencimiento sobre Evelyn y su opción a La Moneda, ni siquiera si volviese a darse el escenario frente a Michelle Bachelet que suena como carta.

Matthei está jugando un juego altamente riesgoso que tiene sí una ventaja en relación a otros fallidos procesos: la inexistencia de Piñera su principal obstáculo. Pero ¿tendrá -insistimos- la bendición de los controladores de los partidos?