Menos de una hora ha durado el encuentro que el Papa Francisco ha mantenido esta mañana, 8 de abril, en el Palacio Apostólico Vaticano con los familiares de los rehenes israelíes que siguen en manos de Hamás. Un encuentro que se produce exactamente seis meses después del brutal ataque a Israel del 7 de octubre que dejó más de 1.100 muertos; ese día 240 personas -entre mujeres, ancianos y niños- fueron secuestradas. Entre ellas había miembros de la familia Bibas, Berger, Dalal, Miran, Nimrodi, informa la Santa Sede.
Sus familiares, que llevaban pancartas con los rostros de los secuestrados, fueron recibidos hoy por el Papa, que ya se había reunido en dos ocasiones, el 22 de noviembre de 2023, con los familiares de los rehenes israelíes y con un grupo de palestinos cuyos parientes están en Gaza pagando el altísimo precio de la guerra. «Francisco quiere manifestar la cercanía espiritual al sufrimiento de cada uno», explicó entonces el portavoz Matteo Bruni. La liberación de los rehenes es el llamamiento que el Papa ha hecho innumerables veces en sus pronunciamientos públicos, junto con un alto el fuego en la Franja y el acceso de la población a la ayuda humanitaria, como condiciones urgentes y necesarias para una solución del conflicto.