Después de 9 años, el aumento del número de diputados parece haberse convertido en una verdadera trampa del sistema político en el Congreso, motivando que la esperada representatividad terminara convirtiéndose en una fragmentación cada vez más insostenible para el modelo de gobernabilidad y acuerdos que se requiere con urgencia.

El mayor problema es que salir de este pozo político se ha convertido en una sucesión de oportunismos que, más que buscar solucionar el entuerto, mas bien apuntan a sacar el mejor y más egoísta provecho que lograr un equilibrio virtuoso para el sistema: redistribuir distritos, diezmar los centros de poder rivales para reforzar los propios centros de poder.

En este contexto, ayer llegaron hasta La Moneda representantes de la UDI para solicitarle al presidente de la República, Gabriel Boric, que le dé urgencia a dos proyectos que buscan reformar el sistema político del país. Uno de ellos contempla que los partidos que no alcancen el 5% de los votos, no puedan tener representantes en el Congreso. La otra propuesta, en tanto, plantea disminuir el número de diputados de 155 a 120.

La solicitud

En carta entregada en el Palacio Presidencial, la bancada de diputados gremialistas pidió dar urgencia a un proyecto que «dice relación con establecer un umbral de un 5% para que los partidos puedan formar parte de la Cámara de Diputados, salvo que a nivel nacional hayan sumado un total de ocho parlamentarios. Lo anterior, con la finalidad de evitar una mayor dispersión y la presencia de pequeñas colectividades en el Congreso, que como ya ha quedado demostrado sólo responden a intereses identitarios y terminan dificultando cualquier acuerdo».

Asimismo, indican que, «como bancada también creemos necesario comenzar a discutir seriamente respecto a la disminución del número de legisladores, puesto que la evidencia ha demostrado que el haber incrementado los escaños no significó una mejor representación, sino que por el contrario, terminó provocando que candidatos con menos del 1% de las preferencias -algunos incluso con un 0,24% (948 votos)- obtuvieran un cupo en la Cámara.

Añadieron que en «ambas propuestas, vale recordar, fueron acordadas de manera transversal por la Comisión Experta que antecedió al Consejo Constitucional en 2023, donde todos los partidos que estaban representados -desde Republicanos hasta el Partido Comunista- concordaron en la necesidad de establecer un umbral de un 5% y disminuir el número de parlamentarios, por lo que nos parece del todo pertinente que pueda otorgar las urgencias que sean necesarias».

Objetivo final

Al respecto, el Doctor en Historia y académico de la Universidad Adolfo Ibáñez, Fernando Wilson, comentó que «la UDI hace tiempo que quiere bajar el número de diputados por cuanto el incremento se dio en el contexto del sistema electoral -bajo la administración Bachelet 2 fue el proyecto estrella de Peñailillo como ministro del Interior, y genera por tanto una suerte de cuenta pendiente».

Hizo hincapié además en que «ahora, eso se combina también con la propuesta de reducción que se contuvo en el segundo proyecto constitucional, si bien era una cifra mayor, de 138, y de alguna manera es un juego de poder en ese sentido por cuanto, más que importar el número, importa el redistritaje»

En ese sentido, recalcó que esto último implicaría «modificar una serie de circunstancias en las cuales, desde la perspectiva del partido se sobredimensiona la electoralidad de la izquierda fundamentalmente, particularmente en la zona norte y en algunos bastiones en los cuales en especial el Partido Comunista tiene un cierto grado de beneficio dentro del sistema«.