Con el objetivo de evidenciar la problemática y los mitos en torno al consumo de alcohol en menores de edad, la Asociación Pro Consumo Responsable de Bebidas Espirituosas (Aprocor) y Cadem presentaron los resultados de la “Radiografía del Consumo de Bebida con Alcohol en Verano”.
Entre los hallazgos más preocupantes arrojados por el estudio, destaca que un 6 de cada 10 personas (62%) asegura que durante el verano se “relajan” las medidas de fiscalización al acceso al alcohol por parte de menores de 18 años. Los encuestados proponen que para evitar que menores accedan a este tipo de productos se debe aumentar el control policial en las calles; imponer multas exorbitantes a quienes vendan alcohol a menores y sancionar a los padres de menores que sean sorprendidos tomando.
El informe revela además que el 53% cree que tomar frente a menores puede influenciarlos a beber tempranamente; mientras que solo el 12% no lo considera probable. Asimismo, 5 de cada 10 personas aseveran que la principal razón por la que evitarían tomar delante de un menor sería para que “no normalice el consumo”. Sin embargo, un 30% le daría permiso a su hijo para “tomar en una ocasión especial”, pese a que el 90% fue tajante en que “supervisa el acceso de alcohol de su hijo”.
“Los padres y adultos desempeñan un papel fundamental en la formación de actitudes y comportamiento relacionado con el consumo en sus hijos y bajo ningún contexto los menores deben consumir alcohol, pues conlleva graves riesgos a la salud del organismo en desarrollo. Hacemos un llamado a las familias para que eduquen en esta materia y seguiremos trabajando para promover campañas como #MenoresNiUnaGota y el consumo responsable de bebidas con alcohol en la sociedad”, resaltó el presidente de Aprocor, Juan Pablo Solís de Ovando.
Las conversaciones sobre consumo de alcohol siguen siendo la principal medida de las familias para alejar a sus hijos de la ingesta en el verano. Preocupantemente, 3 de cada 10 padres declaran no conocer los peligros a los que se expone un menor frente al consumo. La “presión social para encajar en grupos de amigos” se esgrime como la principal razón entre los jóvenes para beber, por sobre “la curiosidad” y “la influencia de las redes sociales”.
El estudio completo y las acciones de la campaña #MenoresNiUnaGota se encuentra disponibles en www.aprocor.cl