El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró este viernes que la acusación de genocidio contra Israel que investiga la Corte Internacional de Justicia (CIJ) “no solo es falsa, es indignante”, aunque celebró que el tribunal no ordenara el cese inmediato de las hostilidades.
La CIJ dijo este viernes que no desestimará la acusación hecha por Sudáfrica de que Israel comete un genocidio en Gaza.
”Como todo país, Israel tiene el derecho básico a la autodefensa. El tribunal de La Haya rechazó con razón la escandalosa exigencia de privarnos de este derecho”, afirmó Netanyahu tras conocerse el fallo de la CIJ sobre las medidas provisionales exigidas por Sudáfrica.
“Estamos librando una guerra justa y la continuaremos hasta la victoria completa, hasta que derrotemos a Hamás, devolvamos a todos nuestros secuestrados y aseguremos que Gaza ya no represente una amenaza para Israel”, declaró el primer ministro israelí.
Asimismo, y en una declaración separada en inglés citada por The Times of Israel, Netanyahu agregó que “el compromiso de Israel con el derecho internacional es inquebrantable” y prometió que debido a que la guerra de Israel es contra “terroristas, no contra civiles palestinos”, su gobierno “continuaría facilitando la asistencia humanitaria y haciendo todo lo posible para mantener a los civiles fuera de peligro”.
«En vísperas del Día Internacional de Conmemoración del Holocausto, prometo nuevamente como primer ministro de Israel: Nunca más», añadió, prometiendo «seguir haciendo lo que sea necesario para defender nuestro país y defender a nuestro pueblo«.
Netanyahu ordenó a los miembros de su gabinete que se abstengan de responder a la sentencia provisional de la CIJ en el caso de genocidio, y según la emisora nacional Kan, Netanyahu, a través del consejero de Seguridad Nacional, Tzachi Hanegbi, dio instrucciones a los ministros del gobierno para que se abstuvieran de hacer declaraciones públicas antes de que se diera a conocer una posición oficial del gobierno sobre el asunto.
Tras la resolución del CIJ, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, también condenó la medida, señalando que «la decisión del tribunal antisemita de La Haya demuestra lo que ya se sabía: este tribunal no busca justicia, sino más bien la persecución del pueblo judío».
“Guardaron silencio durante el Holocausto y hoy continúan con la hipocresía y van un paso más allá”, dijo, y agregó que “no se deben cumplir decisiones que pongan en peligro la existencia continuada del Estado de Israel”.