Luego de la polémica suscitada por insistencia del jefe de asesores de La Moneda, Miguel Crispi, a la Comisión Especial Investigadora por el Caso Convenios, la Contraloría volvió a poner límites a Palacio porque dio 5 días de plazo para que entregue explicaciones de las razones que tuvo el exsubdere para que no haya concurrido hasta la instancia legislativa.
Hay que consignar que Crispi está cuestionado, tanto por la oposición como por el oficialismo, por la ausencia en dos ocasiones de concurrir hasta la comisión, por lo que se solicitó un proceso sancionatorio a la Contraloría.
Incluso el Gobierno salió a blindarlo al argumentar que Crispi no tiene la obligación para asistir al ser un funcionario a honorarios, lo cual fue aclarado por el propio contralor Jorge Bermúdez, quien señaló que “cualquier persona, en un estado democrático, que está en una posición de poder, tiene el deber de rendir cuentas”.