Desde los 2000 que se viene advirtiendo, en la industria siderúrgica, que el proteccionismo chino a sus productos y en particular al acero provocaría el quiebre de la industria local representada por Huachipato en Talcahuano, la principal industria de acero de Chile, pero ningún gobierno tomó nota, total es más fácil y barato importar acero chino -totalmente subsidiado como mmuchos otros productos- y así llegamos a 2023 con el inminente cierre de la Siderúrgica Huachipato y que se suma a decenas de decenas de cierre de empresas regionales y nacionales. Y en este caso es crucial mantenerla ya que es una industria estratégica.
Tenía que llegarse a este punto de casi no retorno para que el gobierno de turno enviará -este viernes- al ministro de Economía, Fomento y Turismo, Nicolás Grau, para que recorriera (conociera) las instalaciones de Siderúrgica Huachipato, «instancia en la que dialogó con ejecutivos y trabajadores de la empresa sobre la compleja situación que vive la principal compañía nacional de acero, a raíz de las distorsiones que generan en el mercado los productos importados desde Asia», informó la CAP.
De hecho la CAP en 2015 denunciaba que China subvencionaba su acero: «CAP Acero ha logrado un nivel de productividad y eficiencia que le permitiría competir con cualquiera de estos actores internacionales. Esto, sin embargo, se ve desvirtuado por la comprobada existencia de distorsiones (subvenciones y ‘dumping’) que han merecido una decidida reacción por parte de una variedad de países que, ante similares circunstancias, reconocen el valor estratégico y social de su industria”, señaló, Fernando Reitich, gerente general de la compañía en ese entonces. Ese mimso años(2015) CAP Acero presentó ante la Comisión Antidistorsiones de Precios los antecedentes para la aplicación de salvaguardias para prevenir y reparar el daño provocado por las importaciones de alambrón de acero chino: «El principal origen de este producto es China», informó CAP.
Pero nadie -la autoridad de turno- hizo caso y así se llegó a 2022 en que los costos de producción de acero chileno aumentaron en 34,4%, y con ello imposible competir con el acero chino barato.
Pero el fondo real de esta crisis para la destruída industria nacional, que ha sepultado a varias grandes fábricas en la región del Biobío, la segunda más importante de Chile, es que el inminente cierre de Huachipato, desnuda la precariedad industrial de Chile que hace décadas optó por el camino fácil de la importación sin medir las consecuencias estratégicas y de sobrevivencia de la nación.
Ya poco y nada se fabrica en Chile, de hecho Fanaloza (Loza Penco) también de la Región del Biobío cerró en agosto pasado y fabricará en Colombia y China.
Chile Neocolonia china
Pero lo peor de esta desindutrialización es que el país se vuelto totalmente dependiente de las importaciones principalmente de China.
Pero también Chile depende de las importaciones de insumos alimenticios básicos (trigo, cereales) y para que decir lo que ocurre con los combustibles, es decir el país es de una vulnerabilidad abismante, en cambio países vecinos -a pesar de las graves crisis permanentes en que se encuentran como Perú o Argentina- han mantenido industrias y producción local que a lo menos les asegura la supervivencia.
Aunque suene repetitivo Chile exporta todo el cobre y no produce ni una sola cañería; el verano pasado Chile importó Kiwis de China, tal como publció Infogate bajo el título: «Lo que faltaba: Ahora Chile importa kiwis de China…no se extrañe cuando Chile importe chilenos de China».
Lo de Huachipato debería remecer la estructura pensante de la República y terminar o a lo menos aminorar la cultura “picapiedra”, de lo contrario el país solo tendrá el nombre de “República de Chile” porque será una neocolonia de los grandes controladores productivos del mundo como China.
Vaamos si en su próxima visita a China, el Presidente Gabriel BOric se atreve agolpear la mesa lacada del Sr. Xi, cosa que ningún presidente de Chile se ha aterviso a hacer.
CAP advierte: Factor China en Chile y el mundo
La siderúrgica nacional publicó este 22 de septiembre, tras la visita del ministro de Economía que: «En el año 2000, la producción de acero mundial era de 847,6 millones de toneladas (Mt), donde China aportaba con 127,7 Mt, representando un 15%. El año 2022, China cerró el año con una producción de 1.018 Mt; es decir, un aumento de 697% respecto de 2010, representando un 54% del total. El resto de los países que complementa la producción mundial aumentó a 867,4 millones de toneladas respecto del 2010, lo que representa sólo un 20% de incremento.
Distintos países como Estados Unidos, Japón, India, Tailandia, Corea del Sur, Inglaterra, Canadá, México, Brasil, Turquía, o la Unión Europea, entre otros, han tomado acciones a través de medidas de protección una vez que han detectado distorsiones de mercado, imponiendo barreras arancelarias para asegurar que la industria local tenga condiciones de competencia justa.
Cabe recordar que en 2013 Siderúrgica Huachipato reorganizó sus actividades productivas y suspendió la fabricación de productos planos, por condiciones similares a las que ocurren en la actualidad. Esto significó una disminución de 264.162 toneladas de producción, pérdidas de ingresos que alcanzaron los US$ 117,7 millones y la desvinculación de 370 trabajadores.
distorsiones en productos importados que impiden a la industria local llevar a cabo los planes de una industrialización verde, por lo cual urge la implementación de medidas correctivas.
Cabe consignar que el sector minero nacional se enfrenta a numerosas dificultades para cumplir con la meta de reducir su huella de carbono en el alcance 3 -emisiones indirectas- para el 2030. Actualmente, esta contempla casi la mitad del total de emisiones, por lo que es esencial enfocarse en la mitigación de CO 2 en esta área. Un 15% de esta cifra corresponde a medios de molienda, actividad en la cual Siderúrgica Huachipato es un proveedor clave.