Este martes el Presidente de Rusia Vladimir Putin visitó el Centro Zotov un espacio creativo de la Agencia de Iniciativas Estratégicas que dirige Svetlana Chupsheva, quien le preguntó al Mandatario su opinión sobre los ataques con drones que lanzó Ucrania sobre Moscú, para lo cual Putin -primero- explicó cómo se gestó el conflicto hasta este martes «En respuesta, el régimen de Kiev ha elegido un camino diferente: intentos de intimidar a los ciudadanos rusos con ataques a edificios residenciales. Este es un enfoque terrorista obvio«.

A continuación lo señalado por el Presidente de Rusia:

«Como saben, todo comenzó hace mucho tiempo. Solo tendré que repetir la historia.

Tras el derrumbe de la URSS, cierta rivalidad entre Rusia y Ucrania era inevitable -obviamente- pero parece que quienes se ocupaban de ello creían que se haría de forma civilizada, y además, con respeto a nuestro contexto histórico, cultural y cultural. afinidad lingüística. Pero todo salió de otra manera, desafortunadamente, lo que debería haberse esperado.

Básicamente, el territorio que se llama Ucrania estuvo virtualmente controlado desde el principio por personas que, lideradas por Occidente, tomaron el camino no solo de confrontar a Rusia, sino de crear una “anti-Rusia” en ese territorio.

Tenían que tener consideración por las personas que vivían en el sureste de Ucrania: eran votantes, un gran número de votantes, con los que había que contar. Permítanme recordarles también que, durante el tiempo en que Ucrania estaba emergiendo como un estado independiente, desde el principio, desde el primer paso, se declaró un estado neutral: esto está escrito en su Declaración de Independencia.

En cambio, tomaron gradualmente un camino diferente: unirse a la OTAN, una organización que es hostil a Rusia y fue creada únicamente para luchar contra la Unión Soviética y Rusia.

Y en 2008, sin ninguna señal externa, sin ninguna tensión político-militar, anunciaron que se unirían a la OTAN, que querían unirse a la OTAN, y los países occidentales, los miembros de la alianza, anunciaron en Bucarest, creo, en la cumbre, que las puertas de la OTAN estaban abiertas a Ucrania. No solo nos engañaron y nos dijeron que no habría expansión de la OTAN hacia el este, sino que también llegaron a Ucrania.

En 2014, como saben, llevaron a cabo un golpe de estado y simplemente comenzaron a destruir a todos los que, de una forma u otra, querían construir relaciones normales con Rusia. También desataron una guerra y operaciones militares en Donbass. Luego engañaron a todos para que bajaran la guardia, declarando que querían resolver el problema por medios pacíficos.

Ahora están admitiendo abiertamente que nos estaban engañando solo para desarrollar su capacidad militar y desencadenar hostilidades, incluso contra Crimea. Ahora, como saben, están usando drones para los ataques.

Las Fuerzas Armadas rusas, que tenían que responder: Rusia se vio obligada a responder a la guerra que el régimen ucraniano desató en Donbass. Todos tuvimos que responder lanzando la operación militar especial. Estamos atacando el territorio de Ucrania, pero con armas de precisión de largo alcance, solo en instalaciones de infraestructura militar, ya sea en depósitos de municiones o de combustible y lubricantes utilizados para operaciones de combate.

Hemos hablado de la posibilidad de atacar los centros de decisión. Por supuesto, la sede de la inteligencia militar ucraniana es uno de ellos, y hace dos o tres días se llevó a cabo un ataque a este objetivo.

En respuesta, el régimen de Kiev ha elegido un camino diferente: intentos de intimidar a los ciudadanos rusos con ataques a edificios residenciales. Este es un ataque terrorista obvio.

Primero, debo decir que el sistema de defensa aérea de Moscú respondió adecuadamente. La respuesta ha sido satisfactoria aunque hay margen de mejora. Enfrentamos problemas similares en el aeródromo de Khmeimim en Siria, pero el área alrededor de nuestra base aérea en Khmeimim no es comparable a Moscú, una enorme metrópolis europea. Sin embargo, en general, entendemos qué hacer para reforzar las defensas aéreas de la capital y lo haremos.

Sin embargo, ni siquiera estoy tan preocupado por esto como por los intentos de desencadenar una respuesta rusa. Aparentemente, nos están provocando para que respondamos de la misma manera. Tendremos que considerar cómo abordar esto.

Por supuesto, los ciudadanos ucranianos no pueden hablar debido al terror total contra los civiles. Sin embargo, deberían saber hacia dónde están empujando al país los actuales líderes de Ucrania. Los ciudadanos ucranianos deben comprender que también existen otras amenazas, por ejemplo, intentos de interrumpir el funcionamiento de la planta de energía nuclear de Zaporozhye o utilizar dispositivos «sucios» relacionados con la tecnología nuclear. Hemos hablado de esto más de una vez. Sabemos lo que tienen en mente.

Obviamente, no importa lo que digamos, siempre señalarán con el dedo a Rusia, aunque esto está mal. Nosotros no desencadenamos esta guerra. Permítanme repetir que el régimen de Kiev lo desató en 2014 en Donbass. Tampoco estamos utilizando los medios a los que recurren los ‘traficantes de ruedas’ ucranianos.

Este ataque a edificios civiles en Moscú es una prueba más de ello. Pero repito: el sistema de defensa aérea en Moscú funcionó bien. Pero, de nuevo, hay margen de mejora, sabemos lo que se debe hacer.