La presidenta del INDH, Consuelo Contreras, afirma que los parlamentarios se dejaron llevar por un clima que se fue exacerbando con los días para discutir rápidamente la Ley Naín-Retamal, que le entrega mayores herramientas a la policía para el combate contra la delincuencia, advirtiendo, además, que la inquietud de la ONU es que con esta nueva legislación se puede abrir la puerta para la impunidad o a violaciones a los DDHH.

En entrevista con El Mercurio, Contreras señala que “las palabras de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos reflejan una inquietud legítima, en el sentido de que esta nueva legislación abra la puerta a la impunidad o a violaciones a los derechos humanos”.

“Aquí no hay dilema, como lo han pretendido suponer algunos. La seguridad y los derechos humanos están en armonía. Pero evitar malentenidos supone un ordenamiento preciso y ponderado, y mucho de ello se echa de menos en el contenido actual del proyecto de ley”, explica.

Contreras también plantea que la nueva ley plantea dudas sobre la igualdad ante la ley, ya que “se presumirá la legítima defensa cuando la ejerza un policía, dando por acreditadas cosas que, para el resto de quienes vivimos en Chile, tienen que ser investigadas, esclarecidas y probadas ante un tribunal”.

Además, la timonel del INDH cuestiona la celeridad con la que se ha discutido la normativa, indicando que “tengo la impresión de que los parlamentarios se dejaron llevar por un clima que se fue exacerbando con los días”.

En esa línea, aseguró que de lo contrario “cómo explicar que un proyecto se convirtió en indicación de otro proyecto, que introduce modificaciones en cuanto menos tres códigos. Esto es algo que demandaría meses de discusión, presentaciones de expertos, consultas a la Corte Suprema. No creo que se esté poniendo en tela de juicio el respaldo a los derechos humanos. Los derechos humanos son universales. No dependen de mayorías o minorías políticas”.

“El proyecto se debe debatir en conjunto con otros que permitan contar con un sistema adecuado de protección de la libertad personal, porque como ha señalado la ONU, el desarrollo, la paz y la seguridad y los derechos humanos están vinculados entre sí y se refuerzan unos a otros, Por lo mismo, la delincuencia se tiene que enfrentar con herramientas democráticas y velando por el resguardo de los derechos humanos de todos y todas”, afirmó.