La forma de estudiar cambió: en tiempos donde las enciclopedias fueron reemplazadas por Google y las dudas se responden por Chat GPT, resulta esencial fomentar desde la temprana edad prácticas sobre los riesgos a los que los chicos se enfrentan en el mundo virtual como el sexting, el ciberacoso, la suplantación de identidad y demás delitos que se pueden cometer a través de la web.
La educación es un factor clave en la vida de todos y por ende el sistema educativo debe proporcionar a los niños y jóvenes no sólo herramientas básicas, sino también habilidades necesarias para el día a día y de cara al futuro. Entendiendo que incluso la forma de estudiar cambió y en gran medida las enciclopedias se cambiaron por Google y las dudas se responden por Chat GPT, la formación académica debe ir a la par de un correcto uso de internet y de cuidar y proteger la privacidad de la información.
Bajo este contexto, en una era infundida en la tecnología, existe entonces un fuerte argumento para incluir la ciberseguridad como materia educativa. Es esencial fomentar desde la temprana edad prácticas que resulten en el cuidado de riesgos que se enfrentan, como el sexting, ciberacoso, suplantación de identidad y demás delitos que se pueden cometer a través de la web. Según datos difundidos por la ONG Bullying sin Fronteras, durante el 2022 en el marco del Día Internacional contra el Acoso Escolar alrededor del 70% de los niños y niñas sufren todos los días algún tipo de acoso y ciberacoso.
En su gran mayoría los niños y adolescentes no tienen suficientes habilidades de seguridad cibernética cuando completan la educación primaria y secundaria. Por lo tanto, las familias, el sistema educativo, entidades gubernamentales y organizaciones tecnológicas, de acuerdo con su responsabilidad social, deben trabajar en sincronía, para prevenir y enfrentar los riesgos de la ciberseguridad. Es necesario que se incluya en la formación académica la enseñanza de habilidades de seguridad en línea, como la creación de contraseñas seguras, la identificación de posibles amenazas y la protección de la privacidad.
“Uno de nuestros objetivos es identificar las debilidades que tienen nuestros clientes en materia de seguridad y no solo darles las soluciones para protegerlos sino también acompañarlos en el proceso de aprendizaje para que puedan identificar estas posibles amenazas y bloquearlas desde el primer momento. Trabajamos también muy de cerca con universidades a las que hemos informado de cómo solucionar y afrontar los temas de ciberseguridad, siendo esto algo útil no solo para ellos como organización sino también para sus estudiantes e indirectamente familiares.” explicó Sebastián Sack, VP de Latinoamérica de Noventiq.
En este aspecto, Noventiq facilita varias recomendaciones que los padres e instituciones pueden dar a los niños para que naveguen más seguros en la web. Algunas de ellas son:
- Supervisar el uso de internet: los padres e instituciones deben supervisar el uso de Internet de los niños y asegurarse de que solo visiten sitios web apropiados para su edad.
- Enseñar a los niños a no compartir información personal sobre todo en redes sociales: los padres e instituciones deben enseñar a los niños a no compartir información personal en línea, como su nombre completo, dirección, número de teléfono, escuela, etc.
- Usar contraseñas seguras: los niños deben usar contraseñas seguras y no compartirlas con nadie, incluso con sus amigos.
- No hablar con extraños en línea: los niños deben aprender que no deben hablar con extraños en internet y que deben informar a un adulto si alguien desconocido trata de contactarlos.
- Usar filtros de seguridad: los padres e instituciones pueden usar filtros de seguridad para bloquear sitios web inapropiados y proteger a los niños de contenido inapropiado.
- Usar software antivirus: los padres e instituciones pueden instalar software antivirus en las computadoras de los niños para protegerlos de virus y malware.
- Mantener la comunicación abierta: los padres e instituciones deben mantener la comunicación abierta con los niños y animarlos a hablar sobre cualquier problema que puedan tener en línea.
“Desde nuestra posición, consideramos que la ciberseguridad será definitivamente una materia obligatoria en el sistema educativo. Las nuevas generaciones van a estar más expuestas que nunca a posibles ataques online, tanto a sus dispositivos como a su propia persona. Entender cómo funciona la ciberseguridad, como protegerse y a quién acudir en esos momentos será algo realmente necesario e importante que, probablemente, se incluirá en las escuelas y universidades.” agregaron desde Noventiq.
La ciberseguridad no es solo una medida para empresas y entidades gubernamentales, todos los dispositivos pueden ser vulnerables a graves brechas de seguridad, por lo tanto empezar con una formación temprana al respecto puede limitar el alcance de estos delitos que hoy afectan a menores de edad. La seguridad cibernética es un tema que no puede ser ignorado en la educación. Es importante que los miembros de la comunidad educativa comprendan la importancia de mantener medidas de seguridad en línea, y que se implementen políticas y programas de capacitación efectivos que permitan a todos actuar de manera segura. Solo así podremos garantizar un ambiente de aprendizaje seguro y protegido para todos.