Estas deben contar con suficiente ventilación y no debe ser mucho más grande que el animal, ya que en un accidente podría golpearse contra las paredes.
Un 58,7% de los tutores de perros los incluye en el viaje de vacaciones, mientras que esta cifra es 26% en el caso de tutores de gatos, según la Encuesta Nacional de Tenencia Responsable realizada por la Subsecretaría de Desarrollo Regional con apoyo de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Católica.
Al realizar este viaje en auto, “así como nosotros usamos cinturón de seguridad como medida de cuidado, las mascotas también deben estar seguras dentro del vehículo. Llevarlos sueltos es un gran riesgo, porque pueden distraer al conductor y causar un accidente”, advierte Solange Ávila, médico veterinario de Drag Pharma.
Asimismo, la Ley de Tránsito “prohíbe el transporte de animales domésticos en los asientos delanteros de los vehículos. Cuando éstos sean transportados en la parte trasera de camionetas u otros vehículos abiertos, deberán ir suficientemente asegurados con arneses especiales”.
De contravenir la norma, el riesgo es una multa que puede ir de 0,2 a 0,5 UTM.
Cómo escoger la jaula
Entre los métodos de retención más comunes están las jaulas de transporte de mascotas, cuyas compras aumentan en época de vacaciones.
La experta de Drag Pharma entrega recomendaciones para escoger e instalar una jaula, considerando el bienestar y la seguridad del animal:
• Elegir una jaula resistente, con puerta de metal, fijaciones y cierres seguros, y materiales de buena calidad. Así se reducirá el riesgo de que en situaciones de estrés el animal abra la caja y escape.
• Las dimensiones de jaula deben ser de acuerdo al tamaño del animal, para garantizar que pueda moverse. Cuando la mascota está parada, debe existir un espacio de al menos 7 centímetros entre su cabeza y el techo, y otros 7 cm entre el cuerpo y las paredes de la jaula.
“La jaula debe permitir que la mascota se pare, gire y acueste, pero no es recomendable comprar una jaula de un tamaño muy superior a la mascota, porque con el movimiento o en caso de frenar brusco, se puede golpear con las paredes”, explica Ávila.
• La jaula debe fijarse de manera estable en el automóvil. Un perro o gato pequeño debe viajar en una jaula en el suelo del asiento trasero del auto.
Si la mascota es mediana o grande, es recomendable que la jaula vaya en el asiento trasero del auto, enganchada con cinturón de seguridad, lo que evitará que en una frenada brusca salga disparada. Al comprar una jaula, hay que verificar que tenga enganches para los cinturones de seguridad.
Si va en pick up de camioneta, la jaula debe ir amarrada.
• La jaula debe tener ranuras laterales que aseguren la adecuada ventilación interior para que el animal no sufra un golpe de calor. Debe estar en un lugar del auto donde haya circulación de aire, para que respire sin problemas.
• Semanas antes de un viaje largo en auto, es recomendable hacer paseos cortos para que la mascota se acostumbre al movimiento.
• Durante el viaje, es importante realizar cada dos horas detenciones en la carretera y sacar al animal de la jaula, para que pueda beber agua, hacer sus necesidades y estirar sus extremidades, con la precaución de mantenerla asegurada con correa.
“La mascota requiere moverse. En estas detenciones en carretera, nunca hay que dejar encerrada a la mascota en el auto, ya que podría sufrir un golpe de calor”, finaliza la experta.