· Patricia Esparza, académica de la Escuela de Ingeniería Comercial de Universidad de Las Américas, entrega útiles recomendaciones para emplear bien el aguinaldo de Navidad.
Llega fin de año y junto con el cierre de un ciclo se vienen innumerables gastos, principalmente producto de las compras de Navidad y las celebraciones de fin de año. En este contexto, todo aguinaldo es bienvenido por el bolsillo de los chilenos, quienes intentan sacarle el máximo partido.
Según la “Encuesta de Coyuntura Laboral Aguinaldos, Proyecto de 40 horas y Proyecciones 2022” de EY, consultora experta en servicios profesionales presente en más de 150 países en el mundo, un 91% de las empresas en Chile considera entregar aguinaldo a sus trabajadores para las fiestas de fin de año, promediando los $182.000.
Para aprovechar mejor estos recursos, Patricia Esparza, académica de la Escuela de Ingeniería Comercial de Universidad de Las Américas, entrega útiles recomendaciones para emplear bien este “dinero extra”. “Las personas tienden a pensar que el aguinaldo es un dinero extra en diciembre, pero esto es solo una percepción, ya que financieramente es un ingreso habitual en ese mes”, asegura la académica.
Lo primero, asegura, es “no planificar gastos extras basados en el monto del aguinaldo. La falsa idea de que es un ingreso extra puede llevarnos a gastarlo en cosas superfluas que no tienen ningún impacto beneficioso para el presupuesto, tales como compras innecesarias, gastos en celebraciones y fiestas, por ejemplo”.
De acuerdo a la experta, es importante no modificar nuestros patrones de consumo basándonos en el aguinaldo. Por ello, en segundo lugar, agrega que “un aumento de gastos puede generar compromisos permanentes que podrían aumentar las deudas futuras”. Por ello, enfatiza que “hay que evitar contratos que signifiquen compromisos o deudas financieras a largo plazo, como planes de suscripciones a aplicaciones o servicios de streaming”.
Finalmente, manifiesta que algo muy importante que todos debemos tener en cuenta es que el aguinaldo debe ser utilizado como un ingreso que beneficie nuestra salud financiera futura. “¿Cómo consigo esto? Aprovechando ese dinero para amortizar deudas pendientes o aquellas que se puedan prepagar, ayudando así evitar gestos demás en intereses”, finaliza Patricia Esparza.