Los partidos políticos siguen sin entender que el resultado obtenido en el plebiscito de salida donde se rechazó por amplio margen la propuesta de nueva Constitución no es un “botín” que puedan arrogárselo ellos y es que el slogan de campaña “rechazar para reformar” o “rechazar con amor”, parece que se quedó solamente en eso, un slogan de campaña, ya que ahora Renovación Nacional se sublevó y quiere que el nuevo proceso constituyente para redactar otra Carta Magna se haga entre cuatro paredes y sin que se haga una elección de constituyentes, desoyendo lo que se determinó en el plebiscito de entrada en donde la ciudadanía en su gran mayoría optó porque los partidos y los políticos no se entrometieran en la redacción.

De esta forma, la idea de una nueva Convención Constituyente para redactar otra Constitución está perdiendo fuerza al interior del Congreso, lo cual quedó manifestado por parlamentarios que mostraron posturas contrarias a la idea de nuevas elecciones de constituyentes.

Es así que en la bancada de senadores RN e independientes están apuntando a una comisión de expertos o bien una reforma que sea tramitada en el propio Congreso.

De acuerdo a lo que consigna La Tercera, estas ideas al interior de RN se habrían decantado tras una cena que se hizo el miércoles en la casa del expresidente de la colectividad, Carlos Larraín, quien se reunión con senadores independientes que están en el comité de la tienda política.

La postura de la tienda de Antonio Varas la explica el senador independiente-RN, Juan Castro, quien señaló que “nosotros dijimos que estamos dispuestos a trabajar en una nueva Constitución, pero soy partidario de que sea redactada por expertos. No debemos llamar a una votación. Por ningún motivo. Esa es la posición mía y de varios senadores de Renovación Nacional. No hay ningún apuro. Tenemos que ser capaces de ver cómo elegimos esos expertos”.

El mismo legislador explica que su posición se enfoca a expertos o académicos que sean de preferencia abogados y que sean elegidos de la siguiente forma: un representante definido por cada cinco diputados o por cada dos senadores, llegando a 56 constituyentes “expertos” y donde estarían representadas todas las fuerzas del Congreso.

A esta comisión de expertos también se han sumado los senadores Manuel José Ossandón, María José Gatica, Carlos Kuschel y José García (todos RN), a los que se han incorporado Carmen Gloria Aravena y Kenneth Pugh (independientes que fueron electos en un cupo RN).

Asimismo, en la UDI también han cambiado su discurso tras el plebiscito de salida, ya que a pesar de que el timonel del gremialismo, Javier Macaya, había comentado la posibilidad de una nueva Convención con mecanismos distintos de elección y con una duración más corta, ahora ha comenzado a tomar distancia con esa idea porque “Chile necesita conversar, no negociar o imponer. En campaña tuvimos el compromiso de tener una buena y nueva Constitución. Tenemos que tener una para los próximos 100 años, tenemos que ser capaz de acordarla pronto, y no se puede topar con las próximas elecciones presidenciales”.

Pero no solamente en la derecha la idea de elegir una nueva Convención ha perdido fuerza, ya que en el PS también se han manifestado en contra como es el caso del senador Fidel Espinoza, quien indicó en junio pasado que “tenemos que dejar atrás la Constitución del 80, en eso no hay discusión, pero en lo que no estoy de acuerdo con el Presidente Boric es que tenemos que tener un nuevo proceso constituyente, con nuevos convencionales elegidos. Este proceso que culminó recién significó una millonada de recursos de todos los chilenos, no estamos para farrearnos (el dinero) en momentos difíciles”.

Incluso el diputado socialista Marcos Ilabaca dijo que “hay que analizar los resultados de manera más tranquila y ver si la ciudadanía quiere volver a vivir una Convención Constitucional nuevamente”.