Una buena noticia en medio del marasmo informativo por la violencia desatada que estremece al país: Ayer se publicó en el Diario Oficial el Decreto Supremo del Ministerio del Medio Ambiente que declara al humedal costero Lagos Huillinco y Cucao como nuevo Santuario de la Naturaleza. Esta cuenca hidrográfica -de 3.030,6 hectáreas-, forma parte del Plan Nacional de Protección de Humedales (PNPH), cuyo objetivo central es proteger la biodiversidad y los servicios ecosistémicos en áreas prioritarias de humedales.
Los lagos Huillinco y Cucao -los cuerpos de agua más grandes del Archipiélago de Chiloé- tienen una fuerte influencia marina proveniente del Océano Pacífico y brindan condiciones especiales de hábitat a un gran número de especies. Ambos lagos están conectados por el estrecho Contento y desembocan a través del río Cucao hacia el mar.
El nuevo Santuario de la Naturaleza está integrado por tres unidades: zona que conecta el lago Cucao con el río y desemboca al mar; la ribera de los lagos Huillinco y Cucao; y los lagos Huillinco, Cucao y laguna Quilque.
En términos ecológicos, destaca la presencia de más de 80 especies de aves, donde algunas de ellas corresponden a subespecies endémicas de la Isla Grande de Chiloé: la diuca de Chiloé, diucón de Chiloé, concón de Chiloé y rayadito de Chiloé. Además, se encuentran presentes becasinas, chorlo chileno, chorlo nevado, playero de Baird, colegial, bailarín chico, nuco, tagua común, garza grande, garza chica, pato real, jilgueros, tordos y tiuques, entre otros.
Entre los mamíferos se puede encontrar el huillín, coipo, pudú, monito del monte, quique, zorro de Chiloé y guiña.
Además, hay distintas especies de flora de alto valor natural como alerces, mañío de hojas punzantes, coihue de Chiloé, tepú, avellano y coigüe.
La ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, expresó que la noticia es un hecho muy significativo “ya que este humedal costero alberga una gran diversidad de ambientes que permiten la presencia de un gran número de especies. Esto es de especial relevancia en momentos que el planeta entero enfrenta una grave crisis de biodiversidad”. Por otra parte, la secretaria de Estado destacó “la importancia de los servicios ecosistémicos que brindan estos lagos tanto para los habitantes del sector aledaño al santuario de la naturaleza como para el turismo científico y de naturaleza, uno de los más relevantes de la provincia”.
La protección como área protegida de este humedal costero permitirá contribuir al cumplimiento de los compromisos adquiridos por Chile en el marco de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) y la Estrategia Climática de Largo Plazo de Chile, ambos instrumentos reconocidos en la Ley Marco de Cambio Climático. Dentro de las metas y acciones climáticas comprometidas para el resguardo del océano y otros ecosistemas está proteger al año 2025 al menos 20 humedales costeros.
Cabe recordar que la semana pasada se publicó en el Diario Oficial la declaración como Santuario de la Naturaleza de otros tres humedales costeros en la provincia de Chiloé sumando otras 311,5 hectáreas protegidas: humedal Bahía Curaco de Vélez; humedal Bahía de Quinchao; y humedal costero de Putemún.