Este lunes, el gran responsable de la grave crisis institucional por el mal manejo político, el ex presidente Sebastián Piñera, que se salvó e ser destituido por su incapacidad para gobernar llamando a crear una nueva Constiución, envió una carta en la que se resta de asistir a la ceremonia de entrega de Nueva Constitución.
Piñera, en una carta abierta señala: «Con respecto a su invitación a asistir a la ceremonia del 4 de julio, creo que la forma confusa y contradictoria en que se invitó a la y los ex presidentes no honra la tradición de respeto republicano de nuestro país (…) al igual que los otros expresidentes, he decidido no asistir”.
«Las constituciones deben ser el gran marco de unidad, estabilidad y proyección, dentro del cual se debaten democráticamente las distintas ideas, se resuelven las legítimas diferencias y se construye un mejor futuro para todos (…) para lograr este objetivo es fundamental que la Constitución tenga un amplio y sólido apoyo ciudadano, para que sea reconocida y respetada por todos”, arguyó Piñera.
“En Chile llevamos más de 40 años dividiéndonos y confrontándonos en torno a la Constitución del 80, a pesar de sus múltiples y significativas reformas (…) la inmensa mayoría de los chilenos no quiere seguir dividiéndose y confrontándose en torno a la Constitución durante los próximos 40 años. Quiere unidad y que la Constitución sea la Casa de Todos”, aseguró.