Rosario Rivadeneyra, Diseñadora de Experiencias de Aprendizaje, señala que es de vital importancia que niños y niñas desde edades tempranas comiencen a tomar el gusto a la lectura y adentrarse dentro de este mundo. El hecho de transformar el hábito de leer en un pasatiempo en vez de una obligación ayudará de sobremanera a mejorar una serie de capacidades cognitivas y a prepararlos para su vida adulta.
La lectura es una herramienta que nos ayuda desde pequeños, con ella podemos expandir nuestro vocabulario, en conjunto con la capacidad de atención y ampliar nuestra mirada sobre el mundo que nos rodea. Pero ¿por qué? porque las historias y su estructura ayudan al cerebro del menor a razonar en orden y a vincular causas, efectos y significados.
Rosario Rivadeneyra, Diseñadora de Experiencias de Aprendizaje en Beereaders , herramienta digital que fortalece la comprensión lectora de los estudiantes, a través de metodologías de aprendizaje basadas en dinámicas de juego y recompensas, comenta, “en nuestra vida adulta solemos sumergirnos en la lectura literaria de manera recreativa, persiguiendo a un escritor o escritora que nos ha cautivado con su prosa, adentrándonos en temáticas como la poesía, el misterio o el romance, entre otros. Sin embargo, en nuestra etapa escolar, las lecturas fueron seleccionadas por adultos, en la mayoría de situaciones”.
En ese sentido, destaca el compromiso con las infancias en relación a la creación de hábitos lectores, “los adultos, ya sea desde la escuela o el hogar, tenemos la gran responsabilidad de crear experiencias positivas y, en lo posible, memorables de lectura en niñas, niños y adolescentes. Una forma de hacerlo, además de la selección adecuada del libro o las estrategias que usemos, es tener clara nuestra posición como mediadores de lectura”.
Rivadeneyra añade, “en nuestro propio afán de cumplir objetivos curriculares o desarrollar habilidades lectoras para las etapas de infancia y adolescencia, olvidamos el aspecto emotivo de la lectura y lo importante que es tenerlo en cuenta para que la experiencia sea autónoma, competente y, sobre todo, agradable”.
Respecto a los momentos de relación con el libro, comenta, “el ambiente que rodea a la lectura debe ser de respeto e interés o ritmos, de escucha a opiniones y de contención o comprensión de emociones e, inclusive, debe dejar un espacio al silencio”. En ese sentido, debemos promover la creación de lectores autónomos que tengan la libertad de escoger sus espacios y momentos de lectura, buscando herramientas que faciliten ese proceso.
Para más información o solicitar un demo de esta innovadora herramienta, ingresar a www.beereaders.com o escribir al correo comercial@beereaders.com