El Presidente Gabriel Boric, descartó que tenga diferencias con la ministra del Interior, Izkia Siches, luego de que la secretaria de Estado desmintiera esta mañana que se haya pedido la renuncia a su jefe de gabinete, Roberto Estay.
“Hay algo que creo que es un principio esencial en el servicio público, que los cargos de confianza son de confianza del jefe de servicio y en eso estamos totalmente de acuerdo con la ministra Siches”, aseguró el Mandatario en medio de su gira iniciada este miércoles en la Región de Magallanes.
Añadió que “en esto no tengo una discusión con la ministra, con la ministra me reúno prácticamente todos los días, estamos alineados. Todos los ajustes que haya que hacer en los equipos de Interior los va a anunciar la ministra, y en eso estamos trabajando en conjunto para sacar adelante los desafíos del Gobierno”.
Asimismo, sostuvo que “esos anuncios le corresponden a ella y a las evaluaciones que hagan en su equipo”.
Gobierno complejo
Al referirse a los próximos escenarios de su administración, ahora que ya acabó su período de instalación, como él mismo lo anunció la semana pasada, el Jefe de Estado reconoció que “yo tengo muy claro de que nuestro Gobierno va a ser un Gobierno difícil, de que recibimos una sociedad profundamente fracturada, de que hay dolores que no se van a sanar de la noche a la mañana y que seguramente esa angustia va a afectar en momentos la popularidad o la aprobación, pero sepan de que yo voy a ser un Presidente que va a estar firme al timón”.
Fue así que destacó el anuncio de la reasignación «de más de 700 carabineros a las comunas donde más delitos se están cometiendo, para justamente ayudar a que la gente se sienta segura en sus barrios”
Asimismo, hizo hincapié “en las reformas estructurales, ya iniciamos los diálogos por la reforma previsional, con trabajadores, empresarios y Gobierno. Iniciamos los diálogos por la reforma tributaria, en donde yo hago un llamado a los grandes empresarios de nuestro país a que entendamos que un país que no está cohesionado, no puede crecer”.
El Presidente subrayó al final que “un país cohesionado es mejor para todos y todas. Y ahí el aporte que se pueda hacer en el marco de la reforma tributaria, que tiene que ser un gran pacto tributario y social, no de unos contra otros, un gran pacto tributario y social, lo podamos sacar adelante”.