Hasta La Moneda llegó el senador por La Araucanía, Francisco Huenchumilla, para reunirse con la ministra del Interior, Izkia Siches, con el fin de abordar la situación que se viven en la Macrozona Sur, luego de la cual criticó el trabajo que se lleva adelante en la Convención Constitucional, advirtiendo que un eventual triunfo del Rechazo en el plebiscito de salida para la nueva Constitución, podría significar “pegarle a la línea de flotación” del gobierno de Gabriel Boric.

Al respecto, el parlamentario demócratacristiano, calificó la reunión como «muy franca. Yo fui muy claro en darle mi punto de vista, con la experiencia que hemos tenido en esta materia. Y espero que los elementos de juicio que le he dado puedan ser fructífero para que ellos puedan tomar una muy buena decisión”.

Asimismo, agregó que “le manifesté mi voluntad de colaboración para que al gobierno en esta materia le vaya bien, porque este es un tema muy complejo, muy difícil. Que yo no quería que se hiciera más de lo mismo, que han hecho los gobiernos anteriores. Y que aquí lo que se requiere son soluciones concretas”.

Los temores ante la Convención Constitucional

Donde Huenchumilla mostró sus mayores reservas fue en el trabajo de la Convención Constitucional, y al referirse a la decisión del ente constituyente de aprobar la Cámara de las Regiones, que sepultaría al actual Senado, declaró que “no creo en los cambios en los que me llevo la pelota para la casa. Y creo que existe en la opinión pública una cierta sensación de que las cosas no se están haciendo bien, más allá de lo que uno puede leer en los textos e interpretarlos. Porque esto no es un problema jurídico».

Por lo anterior, aseguró que «desde el punto de vista político hay un mal clima hoy en Chile”.

En ese sentido, comentó que “nunca escuché ninguna razón, ningún fundamento, que se me dijera porqué había que eliminar el Senado. Más allá de los subjetivismos personales, que a una gente le caía mal o pensaban que eran un grupo de elite. Pero elementos objetivos nunca los escuché”.

Aún más, recalcó que “no puede ser que partimos en el 80% y hoy las encuestas nos dan empatados. Quiere decir que algo está funcionando mal. Porque corremos el peligro de que si ese clima emocional, más allá de ver los artículos, se va incrementando podemos tener un escenario en que a esta constitución le vaya mal. Eso sería un tremendo problema político para el país, porque significaría pegarle en la línea de flotación a un Gobierno que está partiendo y que predicó y llegó al poder diciendo que Chile tenía que cambiar”, sostuvo enfático.

Ante ese panorama, el veterano senador DC aseguró que “el Gobierno no puede ser neutral, no puede tomar una actitud jurídica, diciendo ‘mire, la convención es autónoma’, claro que es autónoma, pero políticamente hay partidos que están en la Convención y el Gobierno y ellos tienen que asumir la responsabilidad de para dónde van conduciendo este barco”.