El florecimiento de la Quila, o Colihue chileno, cuyo proceso de maduración es de 15 hasta 80 años, culmina con la liberación de sus semillas, las que han sido asociadas, a través de la historia por Mapuches o españoles, con grandes calamidades, como la propagación de incendios, terremotos, o la proliferación de las ratas.
Hoy, con el avance de la investigaciones, se sabe que esas semillas, colaboran con el crecimiento hasta 14 veces- de la población del ratón de cola larga (Oligoryzomys longicaudatus), sobre todo en el sur del país – lo que aumenta las probabilidades de contraer el Síndrome Cardiovascular por Hanta Virus, causado por este roedor aparentemente inofensivo, como advierte la Dra. Catalina Gutiérrez Ruíz, Infectóloga de adultos del HSJD,“estos roedores son muy tiernos, son bonitos, chiquititos, entonces la sensación de riesgo no es como la que tienes con un gran ratón, pero no hay que estar nunca en contacto con él y si lo ves hay que alejarse”.
Si bien el número de contagios en Chile por el Síndrome Cardiovascular por Hanta Virus no supera los 100 en una temporada, el tema preocupa por la alta tasa de mortalidad asociada (entre un 30% y 40%) y porque no existe una cura o tratamiento para la infección que se provoca por la inhalación de los aerosoles de las deposiciones del ratón, su orina, o su saliva, explicó la especialista, “lamentablemente no existe ninguna vacuna o inmunización previa, hay varios estudios y fármacos que se han probado sin una respuesta muy contundente a nivel de la medicina basada en evidencias. Entonces, la verdad, es que el tratamiento es prácticamente un soporte de cuidados intensivos”.
Ya en 2019, el Ministerio de Salud informó de un preocupante aumento de casos del Síndrome Cardiovascular por Hanta Virus en el país, al superar la media quinquenal de 2014 a 2019 (59 casos) en un 18%, con 70 infectados. Si bien el ratón cola larga vive desde Copiapó y hasta Aysén, los enfermos se multiplicaron mayormente en las regiones del Maule, Ñuble, los lagos, la Araucanía y Los Ríos.
Lamentablemente, como los síntomas iniciales del Hanta Virus son bastantes comunes (fiebre alta, escalofríos, mialgia –dolor de cuerpo-, o gastrointestinales en niños o niñas), es importante el antecedente epidemiológico, agrega la Dra. Gutiérrez, “personas que han estado acampando, de vacaciones en cabañas que no se han usado en mucho tiempo, que hicieron caminatas, excursiones, pueden tomar contacto con este ratón o sus residuos y, si a todos estos síntomas previos, se suman tos, sensación de falta de aire, dificultad respiratoria, ahí ya el paciente va a tener que hospitalizarse”.
Para evitar el contagio la Infectóloga del HSJD recomienda, “que las personas, que van a lugares cerrados como cabañas que han estado en desuso, limpien previamente con guantes, con mascarilla, abran las ventanas y para que no se siga aerosolizando este polvo que tiene las partículas, lo ideal es colocar primero agua con cloro para después barrer esa agua de forma suave”.
Finalmente, si usted tiene dudas sobre un eventual contagio, la Dra. Gutiérrez, recalcó que existen varias formas de hacer el diagnóstico, “test rápidos, exámenes serológicos que miden los niveles de anticuerpos, más las confirmaciones a través de PCR, que es la reacción en cadena polimerasa, que también detecta el ADN del virus o el ARN”,todos estos, dijo, están disponibles en el HSJD.