Fin de año es una fecha de celebraciones, las cuales suelen ir acompañadas de abundante comida para disfrutar y compartir con los seres queridos. Cuando existen hábitos saludables y una vida activa durante todo el año, no hay problema en comer algunas calorías extra en las celebraciones, el problema surge cuando además de los malos hábitos y sedentarismo, sumamos excesos como la comida ultraprocesada y el alcohol.

Karla Cárdenas, académica de Nutrición y Dietética de Universidad de Las Américas Sede Concepción, recomienda que terminando las celebraciones lo primero que se debe hacer es no desesperar. “Lo que se hizo y se disfrutó no se puede convertir en culpa, llevando a realizar dietas mágicas, batidos détox o exceso de ejercicio para compensar”, señala.

El cuerpo posee órganos especializados en detoxificar la sangre, el principal de ellos es el hígado, el que procesa toda la sangre que pasa por el estómago y los intestinos, separa sus componentes, los equilibra y crea nuevos nutrientes para que el cuerpo los utilice. “No existe ninguna dieta détox que pueda realizar esta función”, explica la académica.

Por otra parte, es recomendable no pesarse luego de las fiestas. ¿Por qué? Probablemente la pesa marque uno o dos kilos extras, sin embargo, no todo es grasa acumulada, hay mucho líquido retenido por la alimentación alta en sodio y azúcares, además de heces en el intestino que aún no han podido ser eliminadas, debido a los cambios de rutina en estas fechas.

Karla Cárdenas dice que “lo importante es volver a la normalidad cuanto antes, recuperar la rutina de alimentación y actividad física. Si no la tiene, nunca es tarde para empezar, siempre guiado por un profesional del área”.

Para comenzar el año con energía y recuperarse luego de los excesos, la académica de UDLA comenta que un buen inicio es nutrir adecuadamente el organismo, consumir alimentos con antioxidantes, adecuada hidratación, y disminuir el consumo de sodio y azúcar que se encuentran principalmente en los alimentos ultraprocesados.

Algunas recomendaciones básicas son:

• Comenzar el día con fruta: por su alto contenido de antioxidantes, vitaminas y fibra, sobre todo las de colores intensos. Se recomienda consumir 2 a 3 porciones al día.
• Escoger alimentos con alto contenido de fibra:  cereales integrales y semillas como chía, linaza y sésamo. Mejora el proceso de digestión, genera más saciedad, favorece la flora intestinal, genera defensas contra el cáncer de colon, entre otros beneficios.  Se recomienda comer 25 a 35 gramos al día.
• Integrar verduras verdes: son muy bajas en calorías, ricas en fibra, vitaminas, minerales y fitonutrientes. Se recomiendan 2 a 3 porciones al día como mínimo. 
• Tomar agua: El alcohol tomado en exceso durante las fiestas deshidrata el organismo, es importante reponer los líquidos perdidos tomando al menos 8 vasos al día. Se puede saborizar con hierbas, verduras o frutas.