La siguiente es la crónica sobre las elecciones chilenas, de este 19 de diciembre, del influyente diario británico The Guardian: «Chile: candidates battle for moderate votes as presidential race nears end. Far-right José Antonio Kast and left-wing Gabriel Boric in tight race amid divided political landscape«.

Chile: candidatos luchan por votos moderados mientras se acerca el final de la carrera presidencial

El ultraderechista José Antonio Kast y el izquierdista Gabriel Boric en una reñida carrera en medio de un panorama político dividido

La carrera presidencial de Chile avanza hacia su conclusión con los dos candidatos restantes luchando por asegurar votos moderados en un panorama político profundamente dividido .

El candidato de extrema derecha José Antonio Kast se aseguró una victoria por dos puntos en la primera ronda de noviembre , pero las encuestas muestran que Gabriel Boric, el exlíder estudiantil de izquierda que enfrentará en la segunda vuelta del 19 de diciembre, ahora tiene una pequeña ventaja.Viví la oscuridad de la era de Pinochet. ¿Chile regresa allí?Ariel Dorfman.

Desde la primera ronda, Kast ha realizado una gira por Estados Unidos, donde se reunió con políticos conservadores, incluido Marco Rubio, mientras que en Chile se ha concentrado en atraer la participación de votos de otros candidatos de derecha.

Mientras tanto, Boric ha llevado su campaña a las comunidades donde su mensaje no logró resonar.

“El voto de Boric es urbano, progresista y mayormente concentrado en Santiago”, dijo María Cristina Escudero, politóloga de la Universidad de Chile. «Pero ambos candidatos han tenido que llevar físicamente su mensaje a las zonas rurales y marginadas a las que no pudieron llegar a través de las redes sociales».

La campaña de Boric se ha dividido en cuatro giras simultáneas por Chile, con la esperanza de difundir su mensaje de que la “esperanza” triunfaría sobre el “miedo” .

En el extremo norte de Chile, ha estado representado por la Dra. Izkia Siches, ex directora del sindicato médico de Chile, una figura enormemente popular cuyo liderazgo mesurado y pragmático durante el curso de la pandemia le ganó el aplauso generalizado.

En el sur del país, donde Kast ganó la gran mayoría de los votos, Karol Cariola, una congresista del Partido Comunista de la generación de líderes estudiantiles de Boric , ha estado tocando puertas junto con un equipo de alcaldes y simpatizantes.

«Queremos abrir un millón de puertas en cada distrito y barrio de nuestro país», dijo a The Guardian. “Necesitamos mirar a la gente a los ojos y explicarles de qué se trata la campaña de Gabriel Boric y en qué se diferencia de la [de Kast]”, dijo. «Por eso es tan importante que estemos haciendo estos recorridos».

El propio Boric está visitando áreas clave del campo de batalla, y en Rancagua y Curicó, dos ciudades al sur de la capital, Santiago, la cuarta gira ha sido dirigida por un entusiasta grupo de artistas, actores, músicos y figuras culturales.

En cada parada están estacionando un camión contenedor que se ha convertido en un escenario para dar conciertos gratuitos y discursos conmovedores.

“La recepción ha sido hermosa, la gente está alegre y comprometida con nuestra campaña”, dijo Francisca Gavilán, la actriz que interpretó a la venerada folclorista Violeta Parra en la película biográfica de 2011 Violeta Went to Heaven. Ha estado interpretando versiones de las canciones de Parra ante el público.

“Es vital que la escena cultural en Chile tenga un presidente que nos vea y nos respete”, dice Gavilán, “Sin cultura, una nación muere: se contrae y se encoge, como un país sin educación”.

Y mientras tanto Kast como Boric pelean por los votos, la clase política también se ha reajustado después de la bomba de la primera vuelta.

La candidata centrista Yasna Provoste y el exdiputado del Partido Socialista Marco Enríquez-Ominami, que se llevaron el 19% de la votación de primera ronda entre ellos, han respaldado a Boric.

Kast se ha ganado el apoyo de toda la derecha, hablando extensamente en un canal de YouTube dirigido por el empresario Franco Parisi, quien sorprendió a muchos al llevarse el 13% de los votos en la primera vuelta a pesar de nunca pisar Chile durante las campañas.

También aceptó tardíamente un ultimátum de Sebastián Sichel, un exministro de centro derecha que obtuvo él mismo el 13% de los votos, exigiendo que moderara elementos de su programa a cambio de su apoyo.

Eduardo Artés, un comunista de 70 años que ganó menos del 1% de los votos, se ha negado a respaldar a ninguno de los candidatos.

La primera vuelta de las elecciones se caracterizó por una participación históricamente baja, incluso en Chile, donde más de la mitad del electorado suele abstenerse. Solo el 47% de los votantes registrados acudieron en noviembre.

“Si la gente sale a votar, eso favorece a Boric”, dijo Escudero. «Pero ese es un gran ‘si’, y hace que toda la elección sea muy incierta».