El presidente brasileño, Jair Bolsonaro , debería enfrentar cargos de asesinato por su papel en el número de muertos por coronavirus «estratosférico» del país, recomendó un borrador de informe de una investigación del Senado sobre la crisis de Covid en Brasil, reseña The Guardian.
El documento de 1.078 páginas , publicado por los medios brasileños el martes por la tarde, no debe ser votado por la comisión hasta la próxima semana y aún podría ser modificado por los senadores.
Pero el borrador del texto pinta un retrato devastador de la negligencia, la incompetencia y el negacionismo anticientífico que muchos creen que ha definido la respuesta del gobierno de Bolsonaro a una emergencia de salud pública que ha matado a más de 600.000 brasileños.
La decisión «deliberada y consciente» de Bolsonaro de retrasar la compra de vacunas Covid condenó innecesariamente a miles de ciudadanos a tumbas prematuras, afirma el informe.
“Las matemáticas de la situación eran claras: cuantas más infecciones, más muertes. Sin las vacunas, la mortalidad habría sido estratosférica, como resultó ser ”, dice el documento, antes de concluir:“ Nunca lo olvidaremos ”.
El informe es el fruto políticamente explosivo de una investigación del Congreso de seis meses sobre el brote de Covid en el país sudamericano, que comenzó en febrero de 2020 y solo ahora está siendo controlado gracias a los esfuerzos del servicio de salud pública internacionalmente admirado de Brasil.
En las últimas semanas, los principales funcionarios y aliados de Bolsonaro, incluidos los ministros de salud anteriores y en servicio, han sido llevados ante audiencias televisadas , en medio de una creciente ira pública por el comportamiento del gobierno federal.
El borrador del informe acusa al líder de extrema derecha de Brasil de un total de 11 crímenes, entre ellos crímenes de lesa humanidad, incitación al crimen y charlatanería, por su «obstinada» promoción de remedios ineficaces como el fármaco antipalúdico hidroxicloroquina.
Pero quizás la acusación más grave es que el hecho de que Bolsonaro rechazara las ofertas de los fabricantes de vacunas durante el primer año de la epidemia de Brasil equivalía a un asesinato.
El informe dice: “A pesar de todas las vacunas que se ofrecían, el gobierno federal optó por no comprarlas, decisión que fue en contra de todos los estudios científicos que demostraron su seguridad y efectividad, y en contra de los consejos de todos los epidemiólogos que declararon a diario que solo las vacunas salvarían vidas.