Durante la firma del proyecto de ley que crea el Ministerio de Seguridad, ayer viernes, el Presidente Piñera hizo un repaso del estado de la Reforma de Carabineros.

Al respecto, recordó que la creación del nuevo Ministerio justamente es parte de la reestructuración de la policía uniformada, recordando que esta «está en plena marcha y abarca a todo el Sistema de Seguridad Pública».

Detalló que la reforma «busca fortalecer la seguridad ciudadana, mejorando la eficacia de la acción policial, profundizando el control civil de las policías, aumentando la transparencia, la rendición de cuentas y fortaleciendo la mayor coordinación con las demás instituciones. Un aspecto central de esta reforma es incorporar un enfoque de género y asegurar el pleno y total respeto de los Derechos Humanos de todos los ciudadanos».

El proceso

«En diciembre de 2019 convocamos a un Consejo para la Reforma de Carabineros, integrado de manera transversal por expertos en materia de seguridad, Derechos Humanos y modernización del Estado y dimos a conocer la Hoja de Ruta de esta reforma, que no se limita solo a una ley o unos pocos cambios menores, sino que es la mayor transformación en los últimos 100 años de nuestras policías, y lo estamos haciendo con responsabilidad, con diálogo y como una auténtica política de Estado», rememoró el Jefe de Estado.

La reforma de Carabineros se estructura sobre cuatro ejes: institucionalidad y gobernanza; formación y carrera policial; modernización de la gestión; y control de orden público con pleno respeto a los derechos de las personas. Dentro del eje institucionalidad y gobernanza, hoy damos un nuevo paso, fundamental en lo estratégico y en la subordinación a la autoridad política de las policías, que corresponde a este nuevo ministerio.

La Reforma de Carabineros ya incluye avances como la creación de la Dirección de Derechos Humanos y un plan de fortalecimiento institucional en esta área; una mejora de su sistema de control interno y un nuevo sistema de auditoría externa. Esta reforma también incluye la ampliación a dos años del periodo de formación inicial de los Carabineros y la creación de las prefecturas de Control de Orden Público, dependientes de los jefes de zona de cada región, incorporando modelos de diálogo activos con los participantes y manifestantes de acuerdo a recomendaciones de instituciones internacionales.

Adicionalmente, la reforma de Carabineros también incluye un fortalecimiento de su dotación, equipamiento, estrategias y tecnologías. Y no menos importante, la elaboración del nuevo Plan Estratégico de Carabineros pensando en el centenario de la institución el año 2027, el que por primera vez fue elaborado en conjunto y con autorización del Ministerio del Interior, lo que refuerza el principio de sujeción a la autoridad política, e incorpora los principios y ejes centrales de la Reforma de Carabineros.