El ministerio de Defensa de Gran Bretaña confirmó este domingo que siete afganos murieron en medio del caos cerca del aeropuerto de Kabul, lugar en donde miles de personas están congregadas para intentar salir del país luego de la llegada de los talibanes al poder.
A través de un comunicado, un portavoz de Defensa británico señala que “las condiciones en el lugar son extremadamente difíciles, pero hacemos todo lo posible para gestionar la situación de la manera más segura posible”.
Ante la grave degradación de la situación cerca del aeropuerto de la capital, el gobierno británico pidió que se prolongue el plazo para la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán.
“Ninguna nación podrá evacuar a todo el mundo” de Afganistán antes del 31 de agosto, fecha fijada por Estados Unidos para el retiro definitivo de sus fuerzas militares, advirtió el ministro británico de Defensa, Ben Wallace, en el diario Mail on Sunday.
Agregó que “si el calendario estadounidense se mantiene, no tenemos tiempo que perder para evacuar a la mayoría de la gente que espera«, precisando que si los estadounidenses se quedan «tendrán todo nuestro apoyo«.
Según el periódico Sunday Times, el ministro británico de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, está tratando de reunirse con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, para discutir sobre la prórroga del plazo.