“Nunca se le dio permiso para ir a un funeral“, aseguró este jueves la subsecretaria de Salud, Paula Daza, durante la entrega del balance del Ministerio de Salud ante la pandemia, al explicar nuevamente qué ocurrió con el ingreso de la paciente que fue diagnosticada como el primer caso de variante Delta del covid-19 en Chile, y que llegó al país proveniente de Estados Unidos esgrimiendo razones humanitarias.
La autoridad aludió una vez más a las circunstancias en las que ingresó la mujer de 43 años al país durante el balance del estado de la pandemia, luego que se le cursara un sumario sanitario porque se determinó que no dijo la verdad sobre la cuarentena que tenía que hacer, asistiendo al funeral de su padre -motivo por el cual viajó a Chile- pese a que se le habría dicho que no podía hacerlo.
Al respecto, la autoridad indicó que “a la persona nunca se le dio un permiso para asistir a un funeral, el 4 de junio solicitó el permiso para asistir a funeral de su padre, y se le respondió que no se dan permisos para asistir a funerales o velorios”.
A esto agregó que la indicación que se le dio a la paciente fue que tanto ella como las personas del domicilio al que se dirigía y quien la trasladó en vehículo a San Javier, debían hacer una cuarentena por 10 días.
“La cuarentena debía ser por 10 días, la investigación continúa y los nuevos antecedentes los estaremos entregando todos a la fiscalía, todo el trabajo que se hizo (investigación sanitaria) está en la fiscalía”, puntualizó, evitando profundizar más en lo que se ha transformado en un controvertido tema acerca del primer caso confirmado oficialmente de la variante Delta.