No hay caso con el minsitro Enrique Paris, que desde que es ministro de salú (como pronuncia él), pierde constantemente el control ya sea con la prensa, con profesionales de la salus o mejor dicho con quien ose criticar las cuestionadas medidas que adopta para combatir la pandemia que nuevamente complica a Chile po la llegada de la Variante Delta y que su ministerio no logró contener de manera adecuada.
En este contexto, este sábado Paris, simplemente enloqueció por que hubo serios cuestionamientos internacionales a Chile por el uso de la vacuna Sinovac, ya que el primer ministro italiano, Mario Draghi, dijo que «la vacuna china, que nunca aplicó (para la aprobación de la EMA, de la UE) ha demostrado ser inadecuada, observen la experiencia de Chile».
Paris enojado -lo que no es novedad al igual que sus lloriqueos ante las cámaras- dijo: «la gente que no está bien informada no puede dar ese tipo de noticias en el foro europeo representando a países de prestigio. Por lo tanto, exijo que esas declaraciones se corrijan (…) me molesta mucho que una autoridad europea diga que aquí la vacuna no ha funcionado sin tener ninguna información científica que mostrar (…) Estamos cansados de esos comentarios sin datos científicos«.
Pero no fue el único episodio de rabia del señor ministro, porque también las emprendió contra el abogado Raul Meza, quien presentó un recurso de protección en la Corte Suprema contra el secretario de Estado por «vulnerarse la igualdad ante la ley» en la implementación del permiso de movilidad y en una salida totalmente imprudente Paris usando un recurso bastante bajo y hasta vulgar espetó: «lo conozco personalmente y fui pediatra de sus niños. Me llama mucho la atención esta acusación».
Los cuestionamientos de Europa se suman a otros como los ocurrios en abril pasado cuando The Telegraph lapidó control de la pandemia de Chile y plantea “Es un ejemplo de lo que no se debe hacer”. Paris, en esa oportunidad también se enfureció.
A partir de estos dichos, Paris espera que ¿cómo un oblación sempiterna todos los que fueron pacientess suyos no pueden criticarlo? esta errado este ministro porque hace muchos años se descubrió que los médicos no son ni dioses, ni intocabes, más cuano asume el cago político de ministro de Estado que lo vincula a determinado sector político y como tal sabe que estará expuesto a la crítica política y social, si este señor -que tambén fue presidente del Colegio Médico- cree que por el solo hecho de haber sido médico de tal o cuales personas ellos no tienen que criticarlo, está profundamente equivocado y le hace un tremeno daño a los profesionales médicos.
Además, hay que decirlo, este ministro de «Salú», tiene una mínima capaciad para entender la crítica y menos capaciad para hacer autocrítica o ¿acaso ha reconoio los tremendos errores y horrores que se han cometido en el manejo de la pandemia, como lo ocurrio con el caso «Delta» que llegó a Chile?
Cabe recordar como minimizó la moviliad como factor principal de riesgo de contagios, cuestión que en otro momento era considerao por él como de alto riesgo, y ahora no, lo que se traduce en que la ciudadanía simplemente ya no le cree al ministro que dice una cosa y luego se contradice como en esta foto en que el distanciamiento social no exste y es una de las frases más usadas en la campala ministerial.
