Por Renata Altenfelder, jefe global de Branding de Motorola Mobility.
Un estudio global, recientemente publicado por Lenovo, se propuso analizar la nueva realidad de las personas y cómo éstas se relacionan con la tecnología. La investigación demostró que las innovaciones promueven y facilitan la empatía a escala global. Alrededor del 60% de los entrevistados se consideran más empáticos ahora, después de la pandemia del coronavirus. Se entrevistaron más de 15.000 personas de Alemania, Brasil, China, Francia, India, Italia, Japón, México, Reino Unido y Estados Unidos.
Los resultados también refuerzan la afirmación de que la tecnología tiene el poder de impulsar cambios positivos. Se la considera un medio valioso para generar empatía, conexión y compromiso con las causas sociales, ya que da visibilidad a las personas que pueden inspirarnos con sus logros y propósitos.
Para este público, la tecnología es un medio de expresión y un instrumento de transformación, no sólo un objeto de estatus social. Y por ello, la verdadera misión de las empresas de tecnología móvil es promover soluciones y experiencias únicas para todos los perfiles de consumo, teniendo en cuenta estos agentes de cambio. Ustedes se preguntarán «¿cómo es que estas historias reales se relacionan con los valores de la marca?” Una forma de relacionarse es identificando y apoyando aquellos perfiles que marcan la diferencia en nuestra sociedad.
La forma en que se están pensando actualmente las estrategias de comercialización se refleja directamente en la preferencia de los consumidores por las empresas que apoyen causas nobles y valores humanos que vayan más allá del valor de marca tan exigido por el mercado. Lo cierto es que la percepción de estos valores está mucho más relacionada con lo que cada empresa desea contar sobre sí misma, más allá del legado que dejará para las futuras generaciones.
En este sentido, es un orgullo para mí desempeñarme en un área tan estratégica, que no sólo acompaña las transformaciones en la manera en que las personas consumen, comparten y se conectan, sino que continúa innovando, ya que lanza productos y servicios que colaboran con la accesibilidad de la tecnología. Es esta pasión por la innovación la que también vemos en los llamados «risers» – personas que conquistan sus espacios y persiguen sus sueños, con un propósito claro en sus vidas -, que dan visibilidad a las causas colectivas que impactan en sus comunidades y en los movimientos en los que participan.
No es una coincidencia que cada vez más empresas quieran conectarse de forma natural y orgánica a través de acciones con influenciadores digitales. En ese sentido, ¡el factor más importante es precisamente la elección de estas personas! Es un trabajo realizado prácticamente a mano, porque ayudarán en la construcción de una narración que no sólo promueva los beneficios de un producto, sino que también represente una identificación real con el público objetivo de la empresa.
Otro punto que merece especial atención es la práctica de estos valores en las empresas. Así como los risers dan vida y humanizan las campañas, una empresa también necesita adoptar una postura de empuje y audacia para ir más allá y ser disruptiva. Además de, por supuesto, ser siempre genuina en sus acciones. El mensaje es uno: a medida que la tecnología avanza, también podemos evolucionar con ella, como individuos y organizaciones.
