El senador DC, Francisco Huenchumilla, pidió la renuncia del actual presidente del partido, Fuad Chahín, y de la mesa directiva, a quienes responsabilizó del desastroso resultado que obtuvo la falange en las mega elecciones del fin de semana.
El legislador fustigó el “mal diseño electoral” con que su tienda política nombró a candidatos “absolutamente identificados con el modelo de país que se quiere cambiar”, afirmando que la centroizquierda tradicional corrió similar suerte, pero destacó principalmente que la derecha haya perdido su veto.
“Solicito al presidente del partido, Fuad Chahín, y su mesa directiva, que coloquen su cargo a disposición del partido y se busque una mesa de unidad nacional. Lo hago simplemente como militante, como senador, y con el propósito de servir al partido. No me guía otro propósito que el bien superior de nuestra organización”, solicitó
Con estas palabras, Huenchumilla reaccionó a lo que calificó como “una derrota absoluta” de esa tienda política en las elecciones de constituyentes, afirmando que “las elecciones de este fin de semana significaron una derrota completa para la derecha, que deja de tener el derecho a veto que había ejercido durante la constitución de Pinochet, pero también significa una derrota para la centroizquierda tradicional, y en particular, para la DC”.
“Responsabilidades”
Para Huenchumilla, es verdad que hubo “otras elecciones donde se renovaron y se eligieron autoridades regionales, pero esas elecciones tenían características distintas, muy cruzadas por factores personales de los candidatos (…) el núcleo central, con sentido político, lo tenía la elección de los constituyentes (…) en ese segmento, la DC ha sufrido una derrota absoluta”.
“Eso es fruto de la política equívoca que ha tenido la última dirección partidaria, en relación con la derecha; en relación con un mal diseño electoral, donde colocó a personas muy respetables desde el punto de vista personal, pero absolutamente identificadas con el modelo que se quiere cambiar, del país que hemos construido en los últimos 30 años. Así fue como la ciudadanía nos dio la espalda absolutamente”, lamentó.
“Frente a eso hay que asumir la realidad, y la directiva dirigida por Fuad Chahín debe asumir su responsabilidad política (…) creo que debe renunciar a la conducción de la mesa, conjuntamente con ésta, buscarse una mesa de unidad nacional que tenga como propósito enfrentar la contingencia, y sacar adelante, con un sentido distinto, las proyecciones y los objetivos que debe tener un partido de inspiración cristiana que pretende influir en el destino de Chile”, estimó.
Lo que viene
A juicio del senador, para ello “se hace necesario postergar la Junta Nacional (de la DC), entrar en un proceso de conversación interna, postergar las inscripciones de las primarias legales (…) iniciar un proceso de conversación con los partidos tradicionales de la centroizquierda (…) (y con) los partidos de la oposición sin distinciones”.
Huenchumilla insistió en esa idea con el objeto de “concordar una fórmula de trabajo, un mínimo programático que nos permita enfrentar unidos las elecciones, y de esa manera adoptar las decisiones respecto de quiénes van a ser los que nos van a representar definitivamente en las próximas elecciones”.
Asimismo, recordó que “hace meses atrás yo había propuesto, en una carta dirigida al partido, que era necesario tener una mesa de unidad y concordar mínimos programáticos con la centroizquierda, sin distinción. Nada de eso se hizo”.
“Se hace necesario tomar una medida drástica, de lo contrario, esta DC está condenada a desaparecer, manteniéndose más allá del esfuerzo que pueden hacer muchos camaradas a lo largo de Chile con sus actuaciones personales, en las elecciones personales que hemos tenido”, previno el parlamentario.
“Si tomamos esto con altura de miras, pensando en el bien superior del partido, podemos salir de esto. Si no, estamos condenados a recibir el rechazo del pueblo chileno, y transitar en la insignificancia política. Lo hago con la convicción profunda de estar contribuyendo a esta decisión, que debe ser dura y difícil para muchos, pero que a mí me parece indispensable (…) Fuad podrá dedicarse con todas sus energías a desempeñar su rol de constituyente en la redacción de la nueva Constitución”, concluyó.