El secretario general de la CUT, Nolberto Díaz, explicó las razones por las que la multisindical se negó a participar en la reunión convocada por la presidenta del Senado, Yasna Provoste, y cuyo objetivo era la de definir la denominada “Agenda de Mínimos Sociales” que se entregará al Gobierno, acusando la infiltración de “polizontes” en el encuentro.
“Creemos que se le falta el respeto, que se abusa de la confianza de la presidenta del Senado, cuando a esta reunión tan masiva, supuestamente de la oposición, se infiltran como polizontes, personeros políticos que jamás estuvieron con los cambios, que siempre se negaron a las reformas sociales, que no comparten nuestros valores y que cuando fueron senadores o ministros se negaron a cualquier reforma sindical, ambiental o social, a favor de la oposición”, enfatizó el dirigente.
Agregó que la reunión de hoy no fue un encuentro de la oposición, sino que fue un abuso a la confianza de la senadora Provoste, “porque se infiltraron personas y personeros con los cuales, la Central Unitaria de Trabajadores hace rato ya no tiene nada que conversar, porque durante varias décadas, negaron cualquier cambio y cualquier reforma al país. Son, de alguna manera, junto al gran empresariado, los grandes responsables de la miseria que viven miles de chilenos, al haber mantenido un modelo económico y social que, claramente, no solo explotaba nuestros bienes naturales, sino que también aplastaba al mundo del trabajo”.
Señaló que al enterarse de que la reunión sería tan amplia, tan diversa, tan masiva, decidieron restarse por el riego de que se pierda lo central de la urgencia del minuto que se vive, “hoy los chilenos esperan que se fije un salario mínimo no inferior a 500 mil pesos, que se establezca una renta básica universal para el 80% de la población, por un monto no inferior a 500 mil pesos y que el Estado dicte políticas que permitan el control del precio de los alimentos, los enseres de aseo, de higiene y de la construcción, que se han disparado, en la usura de muchos empresarios”.
La Central Unitaria de Trabajadores sostuvo durante la última semana dos reuniones con Yasna Provoste, para entregarle un Plan de Emergencia, el mismo propuesto hace un año al presidente de la República Sebastián Piñera, porque hace mucho rato que la crisis económica social azota a miles de trabajadores y esto no es de hoy ni producto solo de la pandemia.