El aumento de hechos delictuales ha llevado a buscar soluciones integrales que mejoren la seguridad y entreguen herramientas que protejan a las empresas.
La sensación de falta de seguridad ha tomado la agenda pública del país en las últimas semanas. La constante cobertura sobre hechos violentos no solo ha provocado alarma en las personas, sino también en empresas que han visto cómo sus medidas de protección se han visto sobrepasadas.
Debido a esto se ha hecho necesario actualizar no solo los protocolos de acceso a recintos, sino también modernizar y buscar opciones tecnológicas a fin de brindar respuestas concretas para mejorar la seguridad existente y contar con un mejor registro de quienes acceden y salen de edificios, rondan por las instalaciones e incluso llevar un catastro más detallado de quienes tienen prohibido acceder debido a conductas que podrían causar peligro en el futuro.
Asimismo, en sistemas de control de acceso es muy común la vulneración por el uso de más de una persona con el mismo método de acceso. Consientes de esta situación, Scharfstein lanzó al mercado “Smart Access”, una herramienta que soluciona las distintas necesidades en control de acceso de forma unificada a través de software y hardware.
¿Cómo funciona? A través de un sistema informático alojado de forma local o en servidores externos se logran desarrollar una plataforma que permite sostener y comunicar todos los componentes del sistema de control de acceso, pudiendo consultar, guardar y verificar información a fin de mantener en todo momento una visualización de la cantidad de visitas, invitaciones enviadas, tiempo desde el ingreso, estacionamiento o la información que el cliente necesite visualizar en tiempo real o promedio.
Dependiendo del requerimiento que tenga el cliente, Smart Access de Scharfstein recopila información como lectura de placas patente, permite asignar estacionamiento o puestos en filas virtuales, lee cedulas de identidad y compara con listas de acceso denegados.
“Otras funciones destacadas son la administración de permisos personalizados según criterios específicos, ya sea por horario, tiempo máximo transcurrido o áreas específicas de un recinto. Además, este sistema cuenta con “antipassback” que asegura que una forma de acceso –ya sea RUT, patente, tarjeta o código QR– solo pueda ser usado cuando no ha sido utilizado antes para ingresar sin salir”, explica el Product Manager de Scharfstein, Sebastián Morales.