Los arrendatarios tienen el beneficio de vivir en un lugar con altas comodidades, con todos los servicios a la mano, y sin pensar en comprar muebles al momento de instalarse. Para los hoteles, está la posibilidad de arrendar esos espacios desocupados tras la crisis del turismo por la pandemia, y recuperar lo perdido. Acá un ejemplo de dónde encontrar esta opción.
La Pandemia cambió y sigue cambiando la forma en que estamos entendiendo la vida en prácticamente todos los ámbitos. Se generan nuevas necesidades y también nuevas soluciones a dichas necesidades. En este escenario, fue ganando más adeptos la posibilidad de arrendar una vivienda en un hotel, para habitar ahí de manera permanente, con todas las comodidades que esto implica.
Esto es algo que reconocieron como una oportunidad en Grupo Crece, una empresa que abarca dos sectores del mundo Inmobiliario, el asesoramiento de inversiones en el caso de CreceInmobiliario y el Corretaje en el caso de CreceCorredores. Es esta segunda área la encargada de generar una alianza con el hotel Hub, quienes, ante la caída estrepitosa del turismo, vieron la posibilidad de arrendar sus espacios por periodos extendidos y con una serie de ventajas para el inquilino.
Por su parte los corredores de CreceCorredores, cuentan ahora con un producto novedoso y exclusivo, que tiene mucho valor agregado para ofrecer a sus clientes.
“Cuando analizamos la posibilidad de vivir en un Hotel, con todo lo que eso implica, encontramos una solución sumamente eficaz a la mayoría de las complejidades que presenta un arriendo convencional. Por ejemplo, desde lo más básico: la documentación. Normalmente, para un arriendo se solicita un montón de documentos, que a veces, sencillamente, por no contar con ciertos aspectos requeridos, nos cierran puertas de espacios que quisiéramos obtener. No menor es que, cuando pensamos en un arriendo, necesitamos amoblar el espacio. Corresponde a una inversión inicial que a veces no tenemos cómo costear de manera inmediata y eso puede retrasar el proyecto de tener un espacio propio. En un hotel contamos con los espacios completamente amoblados, pero no solo eso, por lo general están amoblados con elementos de buena calidad que buscan el confort de los huéspedes y que además siguen una línea de diseño y buen gusto que le regalan una identidad a nuestro lugar, que de manera personal quizás demoraríamos un poco en alcanzar. O cuando una situación es repentina, y nos obliga a salir de un lugar sin previa coordinación, como un cambio de ciudad por temas laborales, por ejemplo, la velocidad que debemos imprimir al cambio también se vuelve un problema que, la estadía a largo plazo en un hotel, nos soluciona de manera de inmediata”, explica Marisol Rodríguez, responsable de corretaje de CreceCorredores.
Para muchos, pensar en esta posibilidad puede parecer muy lejano, ya que inmediatamente se viene a la cabeza la idea de que elevará los costos mensuales, muy por sobre lo presupuestado. Sin embargo, contar con un presupuesto cerrado y fijo que considere todas las necesidades es una ventaja gigante al momento de organizarnos. “Nos libera de las sorpresas desagradables que un arriendo tradicional a veces nos impone, con gastos comunes descuadrados, cuentas básicas incorrectas, y todo lo adicional que debemos costear cuando queremos tener una buena calidad de vida. En el Hotel, el valor total mensual incluye todos los servicios que nuestro día a día implican para un buen desarrollo”.
“Las bondades del arriendo en hoteles, no significa que el arrendamiento convencional no solucione necesidades de determinado grupo de personas que existe y siempre existirá, sin embargo, nuevos estilos de vida nacen al alero de nuestras nuevas generaciones y en este sentido, la opción del Hotel se vuelve una tremenda oportunidad de vivienda”, agrega Marisol Rodríguez.
Para el hotel en tanto, también es un negocio muy ventajoso, puesto que este sector se ha visto muy golpeado tras la disminución en el flujo de pasajeros que ha generado la suspensión del turismo, debido a las cuarentenas regionales y comunales que se han sostenido por la pandemia que azota en este momento al mundo. Ante esto, poder arrendar de manera extendida las habitaciones, ha significado una real ventaja, ya que los hoteles no pueden esperar pasajeros que no llegarán.
“Ahora la gente se mantiene, y los espacios donde se mantienen cumplen nuevos objetivos, deben ser prácticos, cómodos y funcionales. Son dormitorio, oficina, living, comedor, espacio recreacional y de descanso. Un hotel bien acondicionado, es todo eso a la vez y hUB además, es toda una propuesta en ese sentido, porque cuenta con camas plegables que le dan un nuevo sentido a la utilización de los metros cuadrados disponibles, habitaciones conectadas, pero a la vez independientes, para poder estar con niños, y aún así, mantener la privacidad necesaria”.
De esta forma, este tipo de arriendo establece cierta estabilidad en la ocupación de los espacios disponibles, ingresos mes a mes y no día a día, lo cual les permite sobrellevar de mejor manera la crisis que se está viviendo por la pandemia.
Los arriendos en Hub, tienen un valor que parte desde los 650 mil pesos y cuenta con modelos que van desde los Studios a habitaciones más familiares y ejecutivas.
Un modelo de negocios que ha ido en alza, que se presenta con éxito en varios países desarrollados y que hoy en Chile se extiende, con valores al alcance de las personas y con la posibilidad de vivir con la comodidad de las estrellas, contando con servicios privilegiados y aumentando la calidad de vida, de quien elige esa opción.
Para más información puedes ingresar a https://creceinmobiliario.com/, www.crececorredores.com y a https://hub.cl/