Más de un centenar de personas -principalmente personal de las Fuerzas Armadas y Carabineros en retiro, pero también jóvenes y familias-, se reunieron este jueves en la mañana en Plaza Baquedano para rendir un homenaje al general Manuel Baquedano y la tumba del soldado desconocido, como una forma de desagravio tanto por los constantes ataques sufridos por el conjunto patrimonial como por el próximo retiro de la icónica estatdecisión adoptada ayer por el Consejo de Monumentos Nacionales de retirar temporalmente la icónica estatua para su mantención y restauración.
Por medio de un comunicado entregado en el lugar de la actividad, se señaló que «las organizaciones militares en retiro, ante el aberrante y sistemático agravio que han sufrido los monumentos del General Baquedano y del Soldado Desconocido que lesionan el alma nacional y los valores más caros de nuestra identidad, se han autoconvocado para expresar su sentimiento de rechazo ante tan deleznables actos«.
Agregaron que se trata de una iniciativa «espontánea, emergida de nuestra bases, que no pretende ser masiva, sino que representativa«, señalando que ambos monumentos «son patrimonio nacional, pertenecen a todos los ciudadanos de nuestra querida patria y fueron erigidos hace casi un siglo para que las futuras generaciones le rindieran un justo homenaje, ya que representan un cúmulo de valores y principios que forman parte sustantiva de nuestra chilenidad».
Entre las organizaciones participantes se contaron el Centro de Generales en Retiro del Ejército (CENGE), Unión de Cursos Militares (UCMIL), Centro de Coroneles en retiro del Ejército, Centro de Coroneles y capitanes de navío (Corinav), Cruzada de Reconciliación Nacional, Círculo de Suboficiales Mayores del Ejército, Confederación de las Fuerzas Armadas, Círculo de Suboficiales de las Fuerzas Armadas, y una docena de organizaciones de Regimientos Tradicionales.
El general (R) Enrique Slater, presidente del CENGE, destacó la convocatoria, señalando que «logramos el propósito que era que asistieran los representantes y delegaciones de cada una de nuestras variadas organizaciones y lo importante era testimoniar nuestro afecto al General Baquedano, que sabemos que sale de este lugar pero esperamos que vuelva en gloria y majestad, y también al soldado (desconocido)».
Junto con destacar «el espíritu de nuestra gente: alegre, contenta y queriendo representar nuestro aprecio y nuestro sentido de unidad», efectuó un llamado «a terminar la violencia de una vez por todas; no es la forma, por ahí no vamos a lograr nada; aquellos que creen que con violencia vamos a logra soluciones a los problemas están profundamente equivocados».
Sobre los ataques sufridos por el monumentos, subrayó que «es horroroso que tanto nuestro monumento de Baquedano como la tumba del soldado desconocido sufran todos estos destrozos y este vandalismo. Es incomprensible. Creo que nos está fallando algo en nuestro proceso educativo también, que viene desde atrás. No debimos haber llegado a esta destrucción irracional y que parece que se ha expandido a otros ámbitos de nuestros quehacer nacional. Estoy totalmente en desacuerdo con esto, lamentamos muchísimo lo que está ocurriendo aquí y por eso creo que al final, si no se puede prestar la custodia necesaria, es mejor que salga de este lugar, antes que lo terminen destruyendo. Y que vuelva, por supuesto, en gloria en majestad».
En tanto, el presidente de la UCMIL, general de brigada (R) José Gaete, destacó «lo importante que sería que que la clase política asuma su responsabilidad en esto, porque sin duda estas situaciones son explotadas políticamente desde un punto de la contingencia y partidista, invadido de ideología extranjera y malignas para el ser nacional, por lo tanto, lo que estamos pidiendo es que en el espíritu que nos ha legado el general Baquedano y los miles de chilenos que han forjado esta patria, nuestra clase política, el Poder Judicial tomen la responsabilidad que corresponde para pacificar Chile y ponerlo nuevamente en la senda del progreso.
