Ante el incremento de casos de contagios por Coronavirus que se han registrado en el país en las últimas semanas, el Colegio de Profesores exigió al Ministerio de Educación suspender las clases presenciales en todos los establecimientos educacionales y lanzó una dura advertencia en caso de producirse una muerte en un colegio, ya que el único “responsable será el señor Sebastián Piñera”.

Así lo pidió el timonel del Magisterio, Carlos Díaz, quien dijo que “es absolutamente necesario que se suspendan las clases en todo el país, eso nos parece que es un llamado urgente que hacemos al Gobierno de Sebastián Piñera, al Ministerio de Educación, porque dadas las condiciones que hoy día tenemos no es posible continuar con clases presenciales en todo el país”.

“Junto con ello, queremos también denunciar una serie de situaciones que se han venido dando, en primer lugar con lo que dice relación que en muchas escuelas, en muchas comunas del país, a pesar de que la decisión de los sostenedores ha sido desarrollar las clases en forma telemática, es decir online, se está obligando a los funcionarios a asistir presencialmente, poniendo en riesgo su vida, porque tienen que trasladarse y tienen que permanecer en cada uno de los establecimientos educativos”, denunció.

Asimismo, Díaz señaló que como organismo que reúne a todos los docentes, están “disponibles para turnos éticos, solamente en función de entregar guías o canastas de alimentos familiares”.

Los docentes indicaron que lo anunciado meses antes, respecto a que habría contagios con el regreso a clases presenciales, se cumplió y advirtieron que “en caso de existir un muerto, una persona muerta en cualquiera de nuestras comunidades educativas, el único responsable es el señor Sebastián Piñera y el ministro de Educación”.

Y explicaron que se les hizo ver que no están las condiciones sanitarias para volver a las aulas de forma presencial.

El anunció del Colegio de Profesores se produce en una jornada que el Ministerio de Salud dio cuenta de 5.325 casos nuevos de infectados por el virus, la cifra más alta que se tiene desde el pasado 21 de junio de 2020 cuando se llegó a 5.607 personas afectadas con la enfermedad.